Managua, 18 ago (dpa) – Miles de personas marchan hoy en la capital de Nicaragua, Managua, contra el presidente Daniel Ortega, al cumplirse cuatro meses de la peor crisis política en las últimas décadas.
Los opositores acudieron al llamado del movimiento universitario que inició la revuelta antigubernamental el pasado 18 de abril y participan en una marcha cuyo recorrido fue modificada «por seguridad», debido a la presencia de policías fuertemente armados sobre la ruta originalmente planificada.
La manifestación opositora se lleva a cabo bajo el lema «Aquí nada está normal», en respuesta a una campaña mediática encabezada por la vocera del Gobierno y vicepresidenta Rosario Murillo, que asegura que el país está «avanzando hacia la normalidad».
«Estamos aquí para demostrarle al Gobierno que nada está normal. No hay seguridad, nuestros jóvenes están siendo sacados de sus casas por la policía por participar en una marcha. Solo el Gobierno está empeñado en decir que todo está normal», dijo al Canal 100% Noticias una manifestante.
«No es normal que la policía te baje de tu vehículo y te revisen hasta los dientes y que los paramilitares anden en las calles intimidando al pueblo. No podemos hablar de democracia cuando nos intimidan con armas de guerra. Nada de esto es normal», declaró otro ciudadano que cubría su rostro con una pañoleta azul y blanco y que urgió la salida de lo que llamó «un régimen dictatorial».
Otra mujer de mediana edad dijo a la televisora que marchaba porque «nada está normal en el país», pues en las calles «circulan motos y camionetas llenas de militares armados que se llevan a la gente. Los negocios están cerrados y no hay vida nocturna».
La manifestación que salió de la rotonda «Jean Paul Genie», en la salida sur hacia la vecina ciudad de Masaya, pretendía recorrer una de las principales avenidas de la ciudad, pero tuvo que cambiar su ruta debido a que Murillo, esposa de Ortega, convocó de última hora a simpatizantes y empleados públicos a marchar hoy en la capital.
Sonando bocinas, al son de grupos de marimbas o de populares bandas filarmónicas y ondeando millares de banderas azul y blanco de Nicaragua, los opositores se dirigen hacia la rotonda «Cristo Rey», al oriente de la capital, exigiendo además «la liberación de todos los presos políticos» y «castigo para los asesinos» de los manifestantes fallecidos desde abril a manos de policías y paramilitares, reportó el diario «La Prensa».
Marchas opositoras simultáneas fueron convocadas en diferentes ciudades de las provincias de Nueva Segovia, Estelí, Madriz, Matagalpa (norte), Masaya (oriente), Rivas (sur) y León (occidente).
«Hoy se cumplen cuatro meses. Nuestra lucha no puede terminar. Seguiremos resistiendo cívica y pacíficamente por una Nicaragua con justicia y democracia. Nuestra lucha cívica no para. ¡Libertad para los presos políticos!», tuiteó hoy la opositora Alianza Cívica.
Según esta coalición integrada por campesinos, estudiantes, empresarios y sociedad civil, desde abril 137 personas han sido acusadas y procesadas por graves delitos como terrorismo, crimen organizado y secuestro, entre ellos los líderes campesinos Medardo Mairena y Pedro Mena, y los dirigentes sociales Irlanda Jerez, Christian Fajardo y María Adilia Peralta.
Sin embargo, organismos independientes de derechos humanos afirman que existen entre 400 y 700 desaparecidos, por lo que la oposición exige al Gobierno de Ortega una lista detallada de todos las personas que han sido detenidas por policías y secuestradas por paramilitares en todo el país en las últimas semanas.
La crisis se inició el 18 de abril con una protesta estudiantil y se agravó tras la violenta acción de policías y paramilitares, que ha dejado hasta hoy 450 muertos, 2.800 heridos y unos 400 detenidos según ONG de derechos humanos. El Gobierno registra 198 muertes.
