Londres, 25 feb (dpa) – A Jose Mourinho le gustaría volver a dirigir a Didier Drogba, delantero del Galatasaray con el que se reencuentra mañana como rival. Y no sólo es cortesía, sino necesidad ante la falta de goleadores de la que se queja el técnico del Chelsea.
En su anterior etapa en Londres, Drogba era el preferido de Mourinho, que mañana tendrá que sufrirlo en la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones.
La añoranza por el marfileño no es sólo cariño. «El problema en el Chelsea es que me falta un goleador. Tengo un equipo, pero no un delantero. Tengo a Eto’o, pero tiene 32 años, quizás 35, quién sabe», dijo Mourinho, según captaron las cámaras de la cadena francesa Canal Plus una conversación privada del técnico portugués en un acto publicitario el 17 de febrero.
El club de Londres niega la autenticidad de las declaraciones, pero a la vez señala que Mourinho no era consciente de que lo estaban grabando. La escena desapareció tras publicarse brevemente en una página de Internet.
Pero lo que queda es la desconfianza del portugués hacia un plantel de delanteros que además del camerunés Eto’o conforman el español Fernando Torres y el francés Demba Ba.
Ninguno de los tres duda de que si Drogba estuviera en Londres en lugar de en Estambul seguiría siendo titular con la camiseta azul. El marfileño ha anotado en lo que va de temporada 13 tantos, por delante de Eto’o (diez), Torres (ocho) y Ba (tres).
En su época en Stamford Bridge, de 2004 a 2012, Drogba anotó 157 goles en 342 partidos y ganó diez títulos. En su último encuentro vestido de «blue» y con su último disparo a puerta en la tanda de penales dio al Chelsea el título de la Liga de Campeones en Múnich ante el Bayern en mayo de 2012.
Antes del partido de mañana, Mourinho y Drogba se han regalado elogios. «Si Jose quiere que vuelva al Chelsea, lo pensaría. En Inglaterra sólo hay un equipo para el que jugaría», dijo el marfileño de 35 años.
Drogba alaba a los «blues» y por ello lo considera favorito ante su Galatasaray. «El Chelsea es diez veces mejor» que el campeón turco, que alcanza por segundo año consecutivo los octavos de final guiado por el marfileño y el holandés Wesley Sneijder.
Pero Mourinho está avisado. «Cuando juego, juego para ganar. Mientras haya una mínima posibilidad, creeré en el triunfo. Mourinho me enseñó a odiar perder», dijo Drogba, al que el portugués seguramente nunca criticaría. ni siquiera en privado.
Por Marc Schäfer