Paradise/Malibú, 10 nov (dpa) – Los incendios en California causaron la muerte de al menos nueve personas y daños devastadores, según indicaron las autoridades de este estado en el suroeste de Estados Unidos.
En la ciudad de Paradise, en el norte del estado, varias personas murieron en sus coches, que quedaron calcinados. Las llamas arrasaron más de 6.000 viviendas en esta localidad, en unos incendios que se consideran de los más devastadores en la historia de California. También Malibú, paraíso de los surfistas y localidad de residencia de numerosas celebridades, se ha visto afectado por la voracidad del fuego.
Los incendios en el norte del estado comenzaron en la mañana del jueves y rápidamente se propagaron por más de 30.000 hectáreas, lo que se corresponde con una superficie de 40 campos de fútbol.
Además, en el sur del país, a más de siete horas de coche de distancia, han surgido otros dos grandes focos. Uno de ellos, según medios locales, arrasó más de 14.000 hectáreas en Ventura County, cerca de la ciudad de Los Angeles. Entre otros lugares, las llamas afectan a Thousands Oaks, la localidad que esta semana fue escenario de una masacre con doce muertos.
Decenas de miles de personas tuvieron que abandonar sus casas. Las escuelas cerraron y el suministro eléctrico fue cortado. Miles de bomberos de otros estados norteamericanos luchan contra las llamas incluso de noche.
La pequeña localidad de Paradise, en el norte de California quedó en gran parte devastada. La alcaldesa Jody Jones dijo el viernes que un 80 por ciento de los edificios allí fueron pasto de las llamas.
Durante la huida del lugar se vivieron escenas trágicas. En las calles se veían vehículos calcinados con las ruedas derretidas. Al menos nueve personas murieron, cuatro de ellas quedaron completamente calcinadas en sus vehículos y otras tres fueron halladas ante sus casas reducidas a escombros por las llamas, según indicó el Cuerpo de Bomberos durante la noche del viernes al sábado.
Asimismo la violencia del fuego se pudo constatar en Malibú, donde los famosos vientos de Santa Ana avivaron el fuego y decenas de miles de personas acabaron huyendo. Ni siquiera los altos muros que rodean las lujosas mansiones pudieron detener el avance de las llamas.
Malibú fue evacuada. Esta ciudad a orillas del Pacífico ubicada cerca de Los Angeles es donde numerosas celebridades tienen su vivienda, como es el caso de Barbra Streisand. Estrellas como Lady Gaga, Guillermo del Toro y Orlando Bloom huyeron del fuego.
Bloom, coprotagonista de «Piratas del Caribe», colgó en Instagram el viernes una foto en las que se ven las llamas tras unas casas. «Esta es mi calle hace dos horas», escribió acompañando a la foto.
La estrella de televisión Kim Kardashian escribió en Twitter: «Estamos todos seguros y eso es lo que cuenta». Las llamas llegaron hasta su propiedad en Hidden Hills, pero al final se consiguió sofocarlas.
El director Scott Derrickson tuvo menos suerte. «Hemos perdido nuestra casa», escribió en Twitter, aunque también señaló que su familia pudo escapar del «infierno».
Por su parte, la cantante Cher, que tiene una vivienda allí desde hace 45 años, señaló: «Me preocupa mi casa, pero no puedo hacer nada».
La voracidad del fuego hizo que huyeran unas 90.000 personas en el sur de California. La hermosas vistas que ofrece la carretera Pacific Highway quedaron borradas por una densa nube de humo. En la carretera costera se registró además un atasco kilométrico. Según las primeras estimaciones de las autoridades, en Malibú y alrededores, así como en el distrito de Ventura County decenas de casas fueron pasto de las llamas, pero por el momento no hay informaciones de muertos o heridos.
Los incendios más graves se registran en los meses de otoño (boreal), al término de la seca estación de verano. Pero en el Estado de California existe una persistente sequía. «A diario es temporada de incendios en California», dijo Ken Pimlott, director del servicio de bomberos Cal Fire.
En octubre del año pasado, varios incendios asolaron miles de hectáreas al norte de San Francisco y en las cotizadas áreas de viñedos Napa y Sonoma. El balance: más de 40 muertos y más de 5.700 inmuebles destruidos, así como una una superficie calcinada mayor que la ciudad de Nueva York.
Para los residentes en Malibú se trata de una sensación ya vivida, pues en los peores incendios registrados hasta la fecha, los de 1993, murieron tres personas. Entonces las llamas arrasaron casi 300 viviendas, entre ellas las mansiones de los actores Sean Penn y Ali McGraw.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, acusó a las autoridades del estado de California de una mala gestión. «No hay razón alguna para esos grandes, mortales y costosos incendios en California que no sea una mala gestión», escribió hoy Trump en Twitter. Se gastan miles de millones al año y pese esto mueren tantas personas, dijo. El mandatario amenazó con retirar los fondos destinados a la prevención de incendios.
California es un estado gobernado por demócratas, la oposición a nivel estatal.
Por Barbara Munker (dpa)