Los concursos de acreedores presentados en los juzgados españoles en el segundo trimestre de este año, el último periodo del que se tienen datos, fueron 2,892. Esta cifra es la más elevada desde el año 2013 y supone un crecimiento del 23,7% con respecto al mismo periodo del año anterior, según indica el Consejo General del Poder Judicial.
El año 2019 continúa la dinámica iniciada a finales de 2018, pues son ya tres trimestres consecutivos con una cifra de concurso de acreedores que se eleva. Para encontrar una cifra tan alta hay que trasladarse hasta el segundo trimestre de 2013.
Hasta junio de este año se han presentado un total de 5.778 concursos de acreedores. Este dato es también significativamente más elevado que el del primer semestre del año 2018, pjues el crecimiento es del 27%. En 2018 se registraron 4.543 concursos acreedores en los juzgados de España.
¿Cómo funciona el concurso de acreedores?
Esta figura, contemplada en la legislación española por la Ley Concursal 22/2003 del 9 de julio puede definirse como un instrumento al que tiene acceso cualqjier empresa o persona física para solventar una situación económica extraordinaria y de crisis.
Las empresas pueden solicitar la declaración de concurso de acreedores cuando no tienen suficiente liquidez par cumplir sus obligaciones, de modo que están ínitmamente ligados con la falta de solvencia.
Ante la pregunta de que es un concurso de acreedores o cuándo llega el momento de solicitarlo, existen dos tipos de situaciones: una es que el negocio siga siendo viable y otra es que la empresa haya ido un poco más allá y alcance la inviabilidad pero aún pueda ser resuelta esta situación.
En ambos casos, los adminsitradores están obligados a instar concurso de acreedores voluntario cuando se llegue a un estado de insolvencia provisional. El concurso es la solución para evitar que los juzgados determinen concurso culpable y de él deriven responsablilidades legales y económicas para el consejo de administración.
Igor Ochoa, economista de referencia en materia de concurso de acreedores, mantiene que la mejor fórmula para evitar este tipo de consecuencias es acudir a consultores y especialistas en el tratamiento de estas figuras legales desde el primer momento que se advierten ciertos problemas de liquidez, tanto con clientes como con proveedores y/o socios.
A pesar de que el total de concursos crece y muestra la cifra más elevada desde el año 2013, los concursos españoles quedan muy lejos de las insolvencias que tramitan los juzgados en Francia, Alemania, Reino Unido e incluso Portugal, un país con un PIB inferior al español.
Esto se debe a la cultura empresarial española, donde ha arraigado con gran fuerza la imagen de que esta herramienta es un castigo, una señal de fracaso que el empresario se niega a asumir. El concurso no se ve como un instrumento de ayuda, como una forma de salir adelante y lograr una segunda oportunidad para reflotar la empresa.
Crecen los concursos presentados ante personas físicas
De los 2.892 concursos presentados en el segundo trimestre de 2019, 1.254 correspondieron a personas físicas sin actividad empresarial. Esta competencia corresponde desde el año 2015 a los juzgados de Primera Instancia e Instrucción, y manifiestan un crecimiento del 46%.
Los 1.728 concursos restantes se presentaron en los Juzgados de lo Mercantil. En esta tipología se registra también un crecimiento, aunque en menor grado, solo un 11,4% con respecto al año anterior.
Del total de concursos, 1.034 fueron declarados, un 12,26% más que en el mismo periodo del año anterior. Únicamente 395 fueron concluidos al amparo del artículo 176 bis.4 de la Ley Concursal, en la que se prevé la conclusión por insuficiencia de masa en el mismo auto de la declaración del concurso. Este dato es menor en un 9% con respecto a 2018.
138 concursos llegaron a la fase de convenio y 745 iniciaron la fase de liquidación, un 25% menos y un 11,3% menos que en 2018 durante el segundo trimestre de 2018.
Cataluña, la comunidad que más concursos registra
Por territorios, Cataluña es la comunidad autónoma donde más concrusos de empresas se presentaron ante los juzgados de lo mercantil, 528. El 30,2% del total de los concursos corresponden a esta comunidad, más del doble que Madrid, la comunidad que ocupa el segundo lugar, con 262 concursos.
Comunidad Valenciana y Andalucía, con 211 y 205 son las siguientes en este registro. Cataluña es también la comunidad con más concursos presentados por personas físicas, 403. En esta modalidad Madrid, Andalucía y Comunidad Valenciana siguen a Cataluña.