Lo «sexy» pasó de moda: vuelven los 90

La marca Michael Kors también revive la década del 90 con colores chillones listos para el rave. Foto: MICHAEL Michael Kors/dpa-tmn

(dpa) – Los 90 fueron una década de rebeldía en las pasarelas. Los jeans se usaban rotos, los pantalones eran bien anchos y se veían contrastes de colores por todas partes. Esa tendencia parecía estar superada y haber quedado en el tiempo, pero ahora evidentemente vuelve a copar las calles. ¿Por qué?

«La vuelta de los 90 se define por un cambio radical de la silueta. Los cortes pasan de ser superajustados a ser supersueltos», explica el experto Carl Tillessen. Según este especialista en modas, lo que se pone de manifiesto en los nuevos diseños es que la relación que tienen los jóvenes de hoy con sus cuerpos es muy diferente a la que tenían los de la generación anterior. «Hoy se busca distanciarse de la exposición del cuerpo permanente y la hipersexualidad de los adultos», sostiene.

Muchas prendas de los 90 son perfectas para lograrlo, porque los pulóveres, las camisetas y los pantalones tenían prácticamente siempre una talla de más. No hace falta más que recordar el jeans de tiro alto, que llegaba casi hasta el ombligo. A eso se suma apuntar al «bad taste», o sea, al mal gusto, como un objetivo. «Los jóvenes buscan en el mercado de pulgas prendas que rompan un tabú del buen gusto», explica Tillessen.

Las marcas no quieren perder el pulso y se suman a la tendencia produciendo otra vez al estilo década del 90, como el calzado deportivo de suelas bien gruesas. «Algunos parecen fabricados con los neumáticos de un camión», opina Antje Drinkuth, decana de una academia de diseño y modas de Berlín. Y es cierto que los diseñadores recurren a materiales poco usuales. «Se hacen, por ejemplo, pilotos largos de cuero o charol», observa Drinkuth.

El «regreso de los 90» no es una mera copia de la moda de aquella época. La vuelta revive algunos de los fundamentos dándoles un aire nuevo. «Las mujeres combinan los jerseys anchos con capucha, también conocidos como hoodies, con faldas de tablitas, por poner un ejemplo», señala Charlotte Schnitzpahn, de una revista alemana especializada. «Los hombres, en cambio, llevarían el mismo jersey con capucha con unas zapatillas chunky y un pantalón de traje.»

Según la experta, la gran ofensiva de marketing de los 90 ha cambiado. «Los logos son mucho más sutiles, pueden aparecer impresos en las mangas o reelaborados en un gráfico», dice Schnitzspahn. Además, se ha ampliado la gama de colores. «A los tonos chillones de antes se sumaron los pasteles y el color arena.»

También se ven los diseños más formales de hace casi tres décadas: los blazers de talla grande y hombreras. Drinkuth observa que estas prendas también tienen modificaciones. Suelen tener un aspecto algo más elegante y estar diseñados en otras telas.

Además de buscar una diferencia radical hacia las prendas «sexys» que resaltaban el cuerpo, las prendas del pasado suelen estar asociadas a épocas libres de preocupaciones, señala el analista de tendencias Tristan Horx. A muchas personas les recuerda las tardes de MTV. Drinkuth, de la escuela de diseño, lo confirma: «A muchos estudiantes les encanta recordar su juventud, las telas, los colores, los aromas. Y plasman eso en las colecciones».

Pero la moda la visten personas más jóvenes que eso, jóvenes para los que ese look es algo nuevo, analiza Schnitzspahn. Lo que buscan, añade, son looks claros y muy llamativos que se transmitan bien en las redes sociales. «La recombinación de elementos de los 90 se arma sobre la pregunta de si un look resulta fotogénico o no», comenta Horx. Hay prendas que les interesan a todas las generaciones: un clásico como la camiseta de Levi’s, por ejemplo.

Otra gran razón por la que reviven estos diseños es el reciclado de prendas que hay en casa. «Los jóvenes tienen una consciencia totalmente distinta sobre cómo se fabrica la ropa», dice Drinkuth, y eso los lleva mucho más a menudo a las tiendas de segunda mano, a los mercados de pulgas o a los armarios de sus padres.

Quien quiera mantenerse al a moda o acercarse a estas tendencias, puede quedarse con los jeans elastizados y combinarlos con una parte superior de talle supergrande, recomienda Tillessen. También funciona al revés: un pantalón bien ancho combinado con un top ajustado. «La prenda superior debería ser varios talles más grandes de lo necesario, no tener un corte ancho. Si no, uno de pronto puede parecer un bombero».

Si uno tiene cierta edad, será mejor evitar este estilo, así nadie dice que uno nunca pudo dejar ciertas épocas.

Por Benjamin Freund (dpa)