Por Klaus Gürtler (dpa) – Es gratis, está instalado en muchas computadoras viejas y nuevas y tiene como mascota un encantador pingüino. A primera vista, el sistema operativo alternativo Linux tiene muchas ventajas. Sin embargo, quien esté pensando en cambiar rápidamente se dará cuenta de que no existe un solo Linux, sino que hay numerosas variantes denominadas distribuciones. Para los neófitos, algunas distribuciones son más adecuadas que otras.
¿En qué hay que fijarse? «Sobre todo en el soporte de hardware», dice Georg Eßer, redactor jefe de la revista «EasyLinux». Lo que pasa es que si este sistema operativo no está instalado en su computadora, de nada sirve ni la interfaz más bonita. «Se puede hacer un test con la mayoría de las distribuciones descargando primero un Live DVD, copiarlo después y arrancar con él la computadora», explica Eßer.
Los Live DVD o Live CD son versiones preconfiguradas de sistemas Linux que generalmente también van acompañadas de un equipamiento básico de software con programas de Office y programas multimedia. Los usuarios pueden descargar estos paquetes como Live Image y copiarlos en un soporte informático. Ello permite arrancar la computadora sin cambiar el sistema existente.
Ya al hacer el test de hardware se manifiestan diferencias entre las distribuciones de Linux. Christian Löbering, subjefe de redacción de la revista alemana «LinuxWelt», recomienda para principiantes sobre todo las variantes Mint y Ubuntu: «Tienen la importante ventaja de ofrecer el soporte de hardware más amplio, por lo que se pueden instalar sin problemas en la mayoría de las computadoras de sobremesa y notebooks».
Según Georg Eßer, puede haber problemas sobre todo con hardware totalmente nuevo, por ejemplo un notebook que usa un chip gráfico de última generación. Además de Mint y Ubuntu, el experto recomienda a los usuarios la distribución openSUSE.
La mejor visión general de las diferentes variantes de Linux, con aclaraciones y enlaces para descargas, la ofrece la página web en inglés DistroWatch.com. La lista ubicada en el margen derecho incluso indica cuáles son las distribuciones más veces pinchadas por los visitantes del portal. Según la lista, las variantes más populares son Mint y Ubuntu, seguidas por Debian. Esta información es especialmente importante para principiantes: cuanto más extendido está el sistema tanto mayor es la posibilidad de encontrar ayuda en los foros correspondientes cuando surgen problemas.
Sin embargo, está claro que no sólo es necesario que una distribución corra limpiamente en la PC, sino que también es importante que el sistema le guste al usuario. Linux le da la posibilidad de elegir entre varias interfaces. La mayor diversidad la ofrece Ubuntu, que existe no sólo con el entorno de escritorio Unity, sino también como Kubuntu con la interfaz KDE, como Lubuntu con LXDE o como UbuntuGnome con el entorno de escritorio Gnome. Sin embargo, la mayoría de estas interfaces también se pueden instalar en otras distribuciones.
«A quienes cambian de interfaz generalmente les gusta que la nueva tenga una estructura similar a la Windows», dice Georg Eßer, quien recomienda por esta razón KDE. También Cinnamon les facilita las cosas a los que cambian de Windows. Una buena opción para computadoras poco potentes es Mate o XCFE. La interfaz Unity de Ubuntu no es tan parecida a la de Windows. Sin embargo, si se toman un poco de tiempo para acostumbrarse, también los neófitos pueden arreglárselas bien.