Por Maria Fiedler– dpa : Recepciones de Año Nuevo, bailes y los días navideños: el invierno es la época de las grandes fiestas. Esta realidad se manifiesta también en la joyería, que en estos meses del año puede ser de alta calidad y glamourosa. Perlas,piedras preciosas y materiales extraordinarios son los artículos de joyería que adornan la época fría del año y que también lucen bien, desde luego, como regalo debajo del árbol de Navidad.
En esta temporada hay en las tiendas sobre todo piezas de plata y de un rojo dorado, aunque también las hay de oro amarillo. «Se combinan perfectamente bien con la moda del invierno, que se caracteriza por el uso de colores más apagados», explica Raphael Fischer, presidente de la Federación Alemana de Orfebres y Joyeros. Otro experto, Thilo Brückner, ha observado además una combinación armónica de diamantes y piedras preciosas de colores, destacando el color verde, que está de moda, con turmalina, peridoto, esmeralda y jade.
Además del look lujoso, que incorpora artículos de alto valor, se puede observar una clara tendencia a la informalidad, dice Renate Wittgenstein, gerente de productos de la Feria de Joyería y Relojería Inhorgenta de Múnich. «Por ejemplo, se combinan dos o tres anillos. Lo mismo pasa con los brazaletes y pulseras». A Wittgenstein le ha llamado la atención que a muchas mujeres les gusta llevar joyas auténticas, de alta calidad, junto con bisutería barata y piezas de imitación, tal como dicta también la moda de las prendas de vestir y los accesorios. «Todo está permitido y se usa según las ocasiones», explica.
Algo parecido pasa con las combinaciones de metales, muy solicitadas en este invierno. En las colecciones se pueden ver cada vez más combinaciones entre metales preciosos y materiales de imitación. Los diseñadores también utilizan con más frecuencia madera o cuero en combinación con elementos metálicos, señala Wittgenstein. Brückner ha observado la misma tendencia y menciona como ejemplo combinaciones de metales con cerámica, porcelana o acrílico. También se admiten combinaciones atrevidas, por ejemplo anillos de plástico con perlas extremadamente caras.
En todas estas tendencias no se trata necesariamente de ahorrar gastos en la compra de metales preciosos, sino que «lo que está de moda es más bien probar cosas creativas, utilizar nuevas técnicas y jugar con los materiales», explica Brückner.
Además, el negro está otra vez de moda. En las colecciones se puede ver no sólo plata ennegrecida y acero fino, sino también oro ennegrecido. Sobre todo el carbón es un producto nuevo que está de moda, dice el experto en joyería, pero siempre en combinación con otros materiales.
En lo que se refiere a los anillos, la tendencia en este invierno está marcada por el anillo solitario, dice el maestro orfebre Fischer. Sin embargo, también se ven con frecuencia anillos finos colocados delante de otros más gruesos, que tienen el efecto óptico de alargar el dedo. Además, es necesario llevar el anillo adecuado que combine bien con el brazalete o la pulsera: «Se está dando importancia a la combinación armoniosa de las joyas», explica Fischer. Este objetivo se logra si todas las piezas tienen una forma elemental geométrica
En cuanto a los relojes, lo que más llama la atención es la variedad de colores. Además, los relojes que están de moda tienen un diseño elegante y son un poco más finos, delgados y pequeños que los de la pasada moda. Una popular característica adicional son representaciones de las fases lunares. También hay una fuerte demanda de diamantes y piedras brillantes en la esfera del reloj.
Según Wittgenstein, las perlas se integran cada vez más en los diseños, y también están de moda los típicos collares de perlas. «Coco Chanel le manda saludos», dice al respecto la experta. También en este segmento la opulencia es notable: «Se ven con cada vez más frecuencia largos collares colocados dos o tres veces alrededor del cuello». Lo que da un efecto muy elegante, según Wittgenstein, es llevar en la noche un vestido de espalda descubierta y un collar con perlas suavemente relucientes que no resalte el escote, sino la parte trasera.
También para los hombres el invierno ofrece algunas cosas nuevas: para los jóvenes están los brazaletes de cuero con elementos de acero fino o plata. A partir de cierta edad, la tendencia va hacia el anillo para hombres para la mano izquierda, así como los gemelos y el alfiler de corbata, señala Fischer.
En este invierno, las joyas para hombres pueden relucir con piedras de alta calidad: en los gemelos hay lapislázuli u ónix, y en los alfileres de corbata o anillos hay diamantes de colores apagados como el marrón coñac. Además, en algunas familias se observa un renacimiento de los anillos heráldicos: «Se los piden cada vez más a los orfebres», asegura Fischer.