La UE mira a Ucrania : Muchas preocupaciones y poca euforia

5875616wucraniaBruselas, 23 feb (dpa) – La Unión Europea (UE) llevaba años pidiendo la liberación de la líder opositora ucraniana Julia Timoshenko. Tras su salida de la cárcel y la destitución del presidente Viktor Yanukovich, Bruselas se muestra cautelosa y se ve confrontada con unas expectativas difíciles de cumplir.

En su comparecencia de la noche del sábado, la responsable de política Exterior comunitaria, Catherine Ashton, pidió a todas las partes actuar con responsabilidad. En sus palabras se traslucía la preocupación por la unidad del país, que cuenta con 45 millones de habitantes.

También desde otras capitales se reaccionó con cautela. El ministro de Exteriores alemán, Frank-Walter Steinmeier, y su colega francés, Laurent Fabius, pidieron preservar la unidad de Ucrania y evitar la violencia. Por su parte, el ministro británico del ramo, William Hague, advirtió que además de grandes oportunidades en Ucrania sigue habiendo enormes riesgos. «La situación política es muy complicada, también en el seno de la oposición», alertó.

Ucrania podría ser un campo de ensayo para una nueva política exterior europea que tome partido, asuma riesgos y no mire hacia otro lado. Ahora Bruselas pide a Kiev una reforma constitucional, un nuevo gobierno y elecciones democráticas.

La UE tiene listo un acuerdo de asociación para Ucrania, acuciada por graves problemas económicos. Pero el acuerdo no llegó a sellarse debido a la injerencia del presidente ruso, Vladimir Putin, que intenta boicotear cuanto puede el proyecto de asociación de la UE con sus vecinos del Este. Es una guerra de poder entre el Este y Occidente.

Tras los acontecimientos de las últimas horas, la UE se ve ahora ante unas expectativas que difícilmente puede cumplir en el corto plazo.

«Estoy convencida de que próximamente Ucrania será miembro de la Unión Europea y de que eso lo cambiará todo», afirmó la ex primera ministra Timoshenko. Unas palabras que darán mucho que hablar en Bruselas.

«La experiencia reciente de la política Exterior de la UE muestra (…) que es un error iniciar demasiado pronto negociaciones de adhesión con un país gran y poco homogéneo de la periferia europea», afirmó el europarlamentario conservador alemán Herbert Reul.

Y es que, según los diplomáticos, el objetivo del acuerdo de asociación es precisamente ofrecer a Ucrania una perspectiva europea sin tener que negociar su entrada en el bloque. En Bruselas no es ningún secreto que en muchos países de la UE hay fuertes reticencias a una entrada de Ucrania en el bloque.

Por otro lado está la cuestión económica, ya que Ucrania vive desde hace años al borde de la bancarrota. Para evitarla necesita miles de millones, pero Occidente dejó claro una y otra vez que para los créditos de urgencia están las reglas del Fondo Monetario Internacional (FMI), sin excepciones. El año pasado, antes del inicio de la crisis, la UE se mostró dispuesta a aportar 600 millones de euros (824 millones de dólares) siempre que se cumpliesen las condiciones del FMI. Pero el préstamo nunca se hizo realidad.

Esa cifra ya no será suficiente, afirman los expertos. «Hablamos de paquetes de ayuda a corto, medio y largo plazo», aseguró Asthon a finales de la semana pasada. La directora gerente del FMI, Christine Lagarde, se mostró hoy mismo dispuesta a apoyar a Kiev, tanto con consejos como con ayudas financieras » vinculadas a reformas económicas».

Después del giro prorruso de Ucrania, el Kremlin prometió a Kiev créditos millonarios. Pero tras un primer tramo de 3.000 millones de dólares, Moscú cerró el grifo. La ayuda volverá a fluir cuando haya un nuevo gobierno, decidió Putin.

Por Christian Böhmer