Buenos Aires, 31 oct (EFE).- La presidenta argentina, Cristina Fernández, aceptó hoy a través de un decreto la renuncia del juez de la Corte Suprema Eugenio Raúl Zaffaroni, presentada horas antes.
En el decreto, publicado en la página web de la Presidencia argentina, Fernández agradece «al magistrado renunciante los valiosos servicios prestados en el desempeño de su cargo».
Zaffaroni envió esta mañana a la presidenta argentina una carta de renuncia a su puesto en la Corte el 31 de diciembre, lo que activará el proceso de selección de un nuevo integrante del máximo tribunal.
«Motivan esta dimisión ineludibles razones normativas y, más lejanamente, éticas y de convicción personal», dijo en su misiva el magistrado, de 74 años y desde octubre de 2003 en el máximo tribunal.
El juez alegó que el «motivo fundamental» de su renuncia es acatar lo dispuesto por la Constitución argentina, que fija como tope máximo una edad de 75 años para los jueces supremos, edad que Zaffaroni alcanzará el próximo 7 de enero.
«No puedo ocultarle que, en los últimos meses, experimento la sensación de que mi tarea en este Poder está agotada, junto con la urgencia en volver a la actividad académica, tanto en el país como en la Patria Grande», argumentó Zaffaroni.
Sostuvo que once años de trabajo en la Corte, «desde la perspectiva del tiempo existencial, es un lapso prolongado, siendo momento de volver a volcar mayor empeño en la labor docente, en la tarea doctrinaria y en la acción en las instituciones científicas internacionales».
El juez consideró que es «indispensable» formar a los jóvenes para que «sean capaces de continuar reflexionando y actuando el derecho».
En este sentido, dijo que Argentina necesita una nueva reforma universitaria y que «el saber jurídico no debe permanecer ajeno a este movimiento de revolución pacífica y silenciosa».
En su carta, el juez deseó a Fernández una «exitosa culminación de su mandato constitucional», que concluirá el 10 de diciembre de 2015, e hizo votos «por su felicidad y ventura personal».
La dimisión de Zaffaroni dejará a partir de enero a la Corte con cuatro miembros, ya que a esta renuncia se suman el fallecimiento este año de los jueces supremos Enrique Santiago Petracchi y Carmen María Argibay, por lo que se deberá iniciar el proceso para designar a un nuevo integrante.
Según una reforma legal aprobada en 2006, el número de miembros de la Corte fue reducido a cinco, sin que ello modificara la entonces composición del tribunal, cuya cantidad de integrantes se iría reduciendo por renuncia o fallecimiento hasta llegar a las cinco sillas.
Los miembros del máximo tribunal son elegidos por el Ejecutivo con acuerdo del Senado.
Hace dos semanas, el jefe de Gabinete argentino, Jorge Capitanich, previendo la inminente renuncia de Zaffaroni, dijo que el proceso de selección de un nuevo miembro contemplará la procedencia, el género y la especialidad.
Según Capitanich, el proceso electivo constará de un sistema de audiencias públicas, con publicación de los antecedentes de los miembros propuestos, y de mecanismos de audiencia pública en el Senado.