Puerto Príncipe, 14 ene (EFE).- Líderes de grupos opositores en Haití anunciaron hoy que intensificarán sus movilizaciones hasta lograr la renuncia del presidente del país, Michel Martelly, un día después de que el Parlamento quedara disuelto por mandato constitucional y el mandatario facultado a gobernar por decreto.
Los opositores al presidente haitiano dijeron que continuarán con sus manifestaciones en las calles hasta que el gobernante abandone el poder, mientras que otros partidos de la oposición moderada y grupos pro gubernamentales advirtieron de que una salida anticipada de Martelly podría resultar en un caos político.
«Estamos decididos a derrocar a Martelly, que es hoy el mayor mal del país», dijo hoy a Efe Assad Volcy, uno de los organizadores de las protestas callejeras.
Los opositores también culparon a Martelly de la supuesta concentración de «todos los poderes» en sus manos como consecuencia del fin del mandato del Legislativo y el fracaso de las autoridades pertinentes para organizar en el tiempo previsto una votación para reemplazar dos tercios del Senado de 30 miembros y la totalidad de la Cámara de Diputados.
«Está claro ahora que Martelly ha convertido al país en una dictadura porque él decidió concentrar todos los poderes en sus manos», dijo Assad Volcy.
El mandatario haitiano llamó esta semana a dirigentes «intransigentes de la oposición» a renunciar a los «disturbios» y unirse a sus gestiones para la formación de un gobierno de consenso que incluya representantes de todos los sectores políticos.
Martelly negó cualquier voluntad de abusar de su poder para gobernar por decreto, que ha sido motivo de preocupación por parte de muchos críticos que temen que el líder haitiano podría aprovechar la situación para restringir libertades ciudadanas.
Una serie de disturbios políticos, liderados por grupos de la oposición, obligó al jefe del Estado haitiano a realizar una serie de concesiones significativas que incluyeron la dimisión de su primer ministro Laurent Lamothe, según recomendó entre otros puntos una comisión de notables designada por el propio gobernante.
Por otra parte, el primer ministro designado de Haití, Evans Paul, aseguró que formará Gobierno entre hoy y el próximo fin de semana.
En declaraciones a la emisora de radio Vision 2000, algunos de cuyos extractos difundió el propio Paul a través de su cuenta oficial en la red social Twitter, indicó que el nuevo Ejecutivo «que se pondrá al frente del país y sus ciudadanos» será «de consenso».
La grave crisis política en Haití empeoró este martes cuando se produjo el cese de funciones del Parlamento (bicameral), según lo establecido en la Constitución, tras no poder renovar su mandato por la vía electoral y fracasar un acuerdo para prorrogarlo.
Durante los intensos encuentros celebrados los últimos días para evitar la parálisis parlamentaria, Martelly aseguró que esas elecciones se celebrarán antes del final de este año.
Al respecto, el primer ministro Paul explicó que las elecciones serán «incluyentes, transparentes y democráticas», y destacó que el Gobierno tiene voluntad de trabajar y que esa premisa será la que guíe su actuación.
«El país está en crisis. Lo importante es que nos unamos y que nos entendamos para salir de la crisis», dijo el primer ministro.
El Gobierno y partidos de oposición no pudieron concretar un acuerdo firmado a finales de diciembre pasado que permitiría al Parlamento mantenerse activo, conocer el programa del primer ministro designado e introducir cambios en la ley electoral, entre otros puntos.
Joseph Guyler Delva
