La ONU en Libia asegura que no se puede imponer soluciones por la fuerza

6557287wTrípoli, 14 ago (EFE).- La misión de Naciones Unidas de apoyo a Libia (UNSMIL, según sus siglas en inglés) ha insistido en que no se pueden imponer por la fuerza las soluciones políticas en el país, donde milicias rivales se enfrentan desde hace semanas.

La UNSMIL ha hecho esta declaración en un breve comunicado publicado hoy en su página oficial después de que el Congreso de los Diputados libio pidiera ayer la intervención de la ONU para proteger a los civiles.

En su nota, la misión internacional subraya que continúan sus esfuerzos «por medios políticos» para alcanzar un alto el fuego entre las distintas milicias como paso previo al comienzo de un diálogo.

«Los esfuerzos van en línea con el objetivo de UNSMIL de ofrecer consejo y ayuda y de facilitar las condiciones para alcanzar soluciones políticas. Naturalmente, la posición de la misión es que dichas soluciones no pueden imponerse por la fuerza», asegura el comunicado.

Ayer, los diputados libios reunidos en la ciudad nororiental de Tobruk, lejos de la violencia de Trípoli, hicieron un llamamiento al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para que intervenga «urgentemente» en el país con el objetivo de proteger a la población y a las instituciones del Estado.

En la capital, milicias de la ciudad de Misrata lanzaron el pasado 13 de junio una ofensiva, bautizada como operación Al Fayer (Amanecer), para intentar hacerse con el control del aeropuerto internacional de Trípoli.

Un mes después de este ataque, el aeródromo continúa en manos de las milicias de Zintán, situada al suroeste de la capital, y que administran el aeródromo desde 2011.

Los choques han causado cerca de 200 muertos y han forzado la huida de miles de personas de las zonas de combates, que se concentran en los barrios del sur y del suroeste de la capital.

Asimismo, el rápido deterioro de la seguridad ha empujado a numerosos países a repatriar a sus ciudadanos y a evacuar al personal diplomático.

En un comunicado difundido anoche, las milicias de Misrata que dirigen la operación Amanecer criticaron al Congreso de los Diputados y condenaron su decisión de solicitar la intervención de la ONU.

Las milicias aseguran no reconocer la autoridad de la Asamblea Legislativa reunida en Tobruk, y la acusan de responder a intereses partidistas y de defender a las que denominan «milicias del caos».

«Las diferencias sobre la legitimidad del Congreso de los Diputados deslegitima sus decisiones, y lo convierte en un adversario, sobre todo cuando varios miembros extremistas utilizan su presencia en las sesiones para continuar con su agenda política y partidista, conflictiva y antipatriótica», dice el comunicado.

El presidente de la Asamblea saliente, Ali Abu Sahmin, junto a una veintena de diputados, ha calificado al nuevo Parlamento de inconstitucional y ha asegurado que debe reunirse en Trípoli para hacer efectivo el traspaso de poderes entre ambas cámaras.