Pamplona, 10 oct (EFE).- La hermana Patricia, clarisa misionera en Sierra Leona durante tres años, ha afirmado hoy que en España hay un caso de contagio de ébola pero las personas que tuvieron contacto con la enferma están «aisladas» y «la población en general está a salvo».
Licencia en medicina por la Universidad de Navarra en 1997, la religiosa, que se encuentra en Pamplona para ser atendida de un problema de salud, ha considerado que «España es demasiado alarmista» con el contagio de Teresa Romero, en el que «puede ser que haya habido un error».
Ha indicado en todo caso que los conocimiento sobre el ébola son limitados porque «no se ha investigado mucho», y por eso ha precisado que «hay que ser prudente» cuando se habla de asuntos como las formas de transmisión de la enfermedad.
La religiosa ha defendido además como «correcta» la repatriación a España de los dos misioneros infectados por el virus y fallecidos en el hospital Carlos III de Madrid, ya que a su juicio no supuso un riesgo para la población y sin embargo para los enfermos, si en España «hay pocas esperanzas», «hay menos» en Sierra Leona, con 7.500 afectados registrados aunque la cifra real de contagiados no se sabe cuál es.
Un país, ha comentado, en el que el ébola convive con el tifus y la malaria, que «mata al 50 por ciento de los niños menores de cinco años»; donde la gran mayoría de la población no tiene acceso a la luz ni el agua, ni tampoco a la información, lo que genera rumores que derivan en miedo; y en el que ahora además «se están muriendo de hambre» por la subida del precio del arroz.
«La situación es muy dramática», ha asegurado, y ha añadido que «no se puede hacer ni un punto de comparación» entre lo que sucede en Sierra leona, donde hasta el diagnóstico es difícil «porque todo el mundo tiene fiebre, vómitos y diarreas», y lo que sucede en España, donde se dispone de hospitales, material y profesionales sanitarios formados aunque pueda «faltar entrenamiento para poner y quitar un traje».
«Todo se ha centrado aquí y la alarma real es allá», ha dicho, y ha subrayado que Sierra Leona necesita «muchísimos médicos y hospitales de campaña», pero médicos «que vayan a ayudar, no a aprender» porque éste «no es el momento de hacer experimentos».
Sin saber cuándo regresará a Sierra Leona ni si lo hará, la hermana Patricia ha recordado su relación allí con el misionero fallecido Manuel García Viejo, del que ha destacado su entrega y disposición, y también la situación actual de José Luis Garayoa, en cuya misión murieron por ébola 121 personas en un sola día.