La Cámara Alta alemana ratifica la introducción del salario mínimo

6458221wBerlín, 11 jul (EFE).- La Cámara Alta del Parlamento alemán (Bundesrat) ratificó hoy la introducción de un salario mínimo interprofesional de 8,5 euros la hora, que entrará en vigor en 2015 y que se revisará cada dos años a partir de 2016.

La cámara de representación territorial respaldó la normativa por amplia mayoría, una semana después de que el Bundestag (Cámara Baja) la aprobara con los votos de la gran coalición de Gobierno -conservadores y socialdemócratas- y de los opositores Verdes.

Excluidos de la nueva medida quedarán los menores de 18 años que no hayan completado su formación profesional, así como los desempleados de larga duración que encuentren trabajo, en los seis primeros meses de su contrato.

Para algunos sectores, como repartidores de periódicos y trabajadores temporeros, la norma empezará a regir en 2017, transcurrido un periodo de transición y hasta que expiren los convenios colectivos actuales.

Alemania es uno de los pocos países de la Unión Europea (UE) donde no existía esta regulación, cuya introducción se consideraba imprescindible e irrenunciable para los socios socialdemócratas de la canciller conservadora Angela Merkel como instrumento contra la precarización del mercado laboral.

La encargada de llevar adelante el proyecto fue la ministra de Trabajo, la socialdemócrata Andrea Nahles, quien finalmente tuvo que admitir las excepciones mencionadas, impuestas por el ala derechista de las filas de Merkel y recomendadas por algunos expertos.

El salario mínimo interprofesional existía ya en 21 de los 28 países de la UE, mientras que en Alemania sólo había regulaciones parciales en algunos sectores laborales específicos.

Los mismos socialdemócratas no trataron de implantarlo en los tiempos de Gerhard Schröder al frente del Gobierno -de 1998 a 2005-, en coalición con los Verdes, pero ahora Nahles lo consideró imprescindible ante la creciente precariedad laboral en el país.

Se estima que la normativa afectará a los 3,7 millones de empleados que perciben ahora sueldos inferiores al mínimo, de manera que un trabajador con jornada completa no cobrará menos de 1.445 euros brutos al mes.