Manresa, 26 dic (EFE).- La Bruixa d’Or Manresa recibe mañana al UCAM Murcia con el objetivo de conseguir una victoria que le permita resarcirse del mal papel que los catalanes ofrecieron en Fuenlabrada, ante un rival directo en la cola de la clasificación.
En casa del equipo madrileño, los catalanes dieron un paso atrás en su juego y cedieron por una diferencia amplia (26 puntos), que podría ser letal en caso de empate a victorias a final de temporada.
Los de Pedro Martínez son colistas con dos victorias, y esperan que mañana el factor pista les ayude contra un Murcia que ha firmado un inicio de liga histórico y que por primera vez en dos décadas tiene posibilidades reales de jugar la Copa del Rey. De hecho, se encuentra entre los equipos elegidos, en la duodécima jornada.
Una situación que dista mucho de la del Manresa, que lucha por conseguir continuidad en su juego y obtener resultados positivos que le abran el camino para salir del pozo de la última posición. Además, el calendario llevará el Manresa a acabar el año en Sevilla, jugando con otro de los equipos que luchan y sufren por evitar el descenso.
La semana de entrenamientos ha sido atípica para el Manresa, con las fiestas navideñas de por medio. El club catalán no podrá contar con los lesionados AJ Ogilvy (que se recupera en Australia) y Peppe Poetta, también en Italia recuperándose. Los dos se podrían reincorporar al equipo con el nuevo año, pero aún no tienen fecha de regreso.
