Madrid, 5 dic (EFE).- El exconcejal del PP en Majadahonda José Luís Peñas ha entregado hoy al juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz los dispositivos (micrófonos, equipos y cables de conexión) que utilizó para grabar al presunto cabecilla de la trama Gürtel, Francisco Correa, grabaciones que dieron origen al caso.
Ruz pidió a Peñas que entregará estos dispositivos para practicar una prueba pericial y comprobar que los CDs y DVDs aportados a la causa no han sido manipulados, como sostienen las defensas de los imputados.
En concreto, según han informado fuentes jurídicas, el exconcejal ha aportado una memoria USB, marca WOXTER, modelo MOVE 50, con logotipo y escudo del consistorio madrileño de Majadahonda y un anagrama.
Además, ha entregado una grabadora marca Olympus, modelo WS-300-M.
El pasado 29 de julio, Ruz solicitó en un auto a la sección de Acústica Forense de la Unidad Central Criminalística de la Policía Nacional que analizase la totalidad de los soportes aportados al procedimiento.
Asimismo, el magistrado pidió que se efectuasen exámenes fonométricos para dilucidar si las voces grabadas se corresponden con las de Correa y su presunto número dos en la trama, el exsecretario de organización del PP gallego, Pablo Crespo, así como la considerada administradora de varias empresas de la red Isabel Jordán.
Las grabaciones de Peñas, que destaparon la trama Gürtel y que han servido de base para múltiples diligencias del caso, contienen las grabaciones de una quincena de reuniones mantenidas entre estos tres imputados durante los años 2006 y 2007.
El pasado 28 de junio, la Audiencia Nacional validó estas grabaciones, después de que 10 imputados, entre ellos Luis Bárcenas, pidieran su nulidad por vulnerar el derecho a la intimidad.
La sección cuarta de lo Penal argumentó que este supuesto no puede equipararse a la técnica periodística de «cámara oculta» puesto que en este caso no ha mediado engaño, ni presión, ni se han extraído datos que afecten a «la zona más intrínseca de la personalidad».
Asimismo, el pasado 7 de octubre, Ruz avaló la legalidad de todas las diligencias practicadas en el caso Gürtel (como pinchazos telefónicos y registros) porque no guardan relación con las escuchas nulas que ordenó el juez Baltasar Garzón y que le costaron una condena de 11 años de inhabilitación.
De esta forma, el magistrado apuntó que el volcado de las grabaciones que no fueron anuladas (como la de Peñas con Correa) se hizo cumpliendo todas las garantías.