Las autoridades de India e Irán ofrecieron el pasado lunes su ayuda a Afganistán y Pakistán tras el el terremoto de magnitud 7,5 registrado durante la jornada, que ha dejado al menos 270 muertos y más de un millar de heridos.
El primer ministro de India, Narendra Modi, se puso en contacto con las autoridades de ambos países para expresar su disposición a entregar «toda la ayuda necesaria» para hacer frente al desastre, según ha informado el diario ‘The Times of India’.
Por su porte, el presidente de la Media Luna Roja de Irán, Amir Mohsen Ziai, afirmó que el organismo está preparado para enviar inmediatamente equipos médicos a ambos países para ayudar en las tareas de emergencia, tal y como informaba la cadena de televisión local ‘Press TV’.
En Afganistán, la cifra de víctimas está en 70 muertos y 302 heridos en provincias como Kabul, Faizabad o Jalalabad. En la capital, Kabul, los vecinos también salieron huyendo de sus casas por miedo a derrumbes.
Sin embargo, los datos son provisionales, ya que en lugares como la provincia de Nangarhar desde el propio Gobierno regional reconocen que aunque llega información de víctimas, no se puede hacer un listado oficial confirmado porque hay zonas remotas donde se tardará mucho en recoger información fiable.
La mayoría de los fallecidos en Pakistán, hasta 191, han muerto en la provincia de Jíber Pajtunjua y en las Áreas Tribales de Administración Federal (FATA), ambas situadas en la frontera noroeste del país, limítrofe con Afganistán. Otras cinco personas han muerto en Punyab, tres más en Gilgit Balitistan y una más en la Cachemira paquistaní.
Además, el terremoto ha provocado cortes en las comunicaciones, como en la capital, Islamabad, donde no funcionan las líneas de teléfono. El primer ministro paquistaní, Nawaz Sharif, ha ordenado poner en alerta y movilizar a todos los efectivos de los organismos pertinentes a nivel federal, civil, militar y provincial para facilitar las tareas de rescate.
TERREMOTO DE MAGNITUD 7,5.
El terremoto ha tenido su epicentro a 254 kilómetros al noreste de Kabul y el hipocentro a 212,5 kilómetros de profundidad. El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) ha informado en un primer momento de un seísmo de 7,7 de magnitud y, posteriormente, lo ha rebajado hasta 7,5.
Unos 40 minutos después del primer seísmo se ha producido una réplica de magnitud 4,8 en la escala abierta de Richter y se espera que continúen en las próximas horas. El Instituto Geológico de Estados Unidos (USGS) ha informado de al menos seis réplicas con una magnitud superior a 4.
