Tras varias semanas de intenso diálogo político entre el régimen de Daniel Ortega y la oposición en Nicaragua, el día de ayer se definió finalmente una hoja de ruta de las negociaciones que se llevarán a cabo para buscar una salida a la crisis.
En este sentido, para garantizar el cumplimiento de la “hoja de ruta”, servirán de testigos distintos representantes de la iglesia católica y evangélica quienes fueron invitados a interceder.
«Se aprobó la hoja de ruta», anunció el nuncio apostólico, Waldemar Stanislaw Sommertag, al leer una declaración conjunta tras la quinta ronda de negociaciones entre el gobierno y la opositora Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia (ACJD).
En dicha hoja de ruta, tanto el Gobierno de Daniel Ortega como la oposición convinieron invitar al nuncio apostólico, al cardenal Leopoldo Brenes, presidente de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN), y al pastor Ulises Rivera, coordinador de pastores evangélicos.
«La mesa considera que con las invitaciones a los testigos y acompañantes nacionales se asegura la inclusión de una amplia gama de nicaragüenses, ayudando a la legitimidad del proceso de negociación», establece el acuerdo concretado el pasado martes.
Soraya Andreina Pérez