Fernández de Kirchner se declara víctima de una persecución judicial

CristinaLa presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, ha asegurado este lunes que es víctima de una persecución por las numerosas causas judiciales abiertas en su contra por presunta corrupción en su mandato (2007-2015).

«No es una sensación térmica, es claro y evidente que estoy siendo perseguida», ha dicho en una entrevista telefónica concedida a la televisión argentina CN5 a su regreso a Buenos Aires, según informa la prensa local.

Fernández de Kirchner ha considerado ridículo que se la vincule a una trama de malversación de fondos públicos y blanqueo de capitales con la excusa de arrendar inmuebles. «Pensar que alguien a partir de un contrato de alquiler hace todo esto es increíble», ha sostenido.

En concreto, ha respondido al último escándalo, según el cual el que fuera secretario de Obras Públicas durante su Gobierno, José López, escondió nueve millones de dólares en un monasterio, y ha pedido una auditoría de las contratas en su mandato.

Interrogada sobre si podría ir a la cárcel por todas estas cuestiones, no lo ha descartado porque «son los riesgos que toma quien tomó la responsabilidad de las cosas». «¿Vos te creés que eso no tiene un precio?», ha cuestionado.

El juez federal Claudio Bonadío ha citado para este miércoles a Fernández de Kirchner para notificarle las órdenes de procesamiento y embargo dictadas en su contra por el caso dólar futuro, que investiga la compraventa de divisa en condiciones perjudiciales para el Estado, según fuentes judiciales citadas por la agencia de noticias Télam.

GOBIERNO MACRI

Por otro lado, la líder izquierdista ha analizado la situación del país suramericano apenas siete meses después de que abandonara la Casa Rosada para ceder a la vara de mando a Mauricio Macri, que ha acabado con más de una década de ‘kirchnerismo’.

Para la exmandataria, «es notorio el bajo nivel de calidad de vida». «Es muy difícil tener otros resultados a partir de políticas de ajuste brutal», ha indicado, al tiempo que ha subrayado que no desea «que le vaya mal al Gobierno».

A este respecto, ha recordado sus logros y los del Gobierno de su difunto marido, Néstor Kirchner. «Con todos los errores, entregamos un país capitalizado (…) Esto no es una cuestión de malos y buenos, esto tiene que ver con la ideología», ha afirmado.