Asturias para mi eres tú, por los momentos que hemos vivido y por lo que aún deseo vivir contigo, por las ciudades y pueblos que hemos conocido y por las que aún quiero descubrir a tú lado, por las playas en las que nos hemos relajado y los trenes que hemos perdido, por los museos que hemos visto y por los que aún no hemos visitado, por esas mañanas de risas y complicidad y esas noches en las que aún puedo soñar…
Asturias para mi es sentarnos a comer en una terraza productos de aquí rodeados de gente de cualquier parte, sentarnos en un puerto a comer un helado mientras el olor del mar nos envuelve, esa es mi Asturias… la de las terrazas con cervezas y tapas, la de los caminos que nos llevan a reírnos después de perdernos, la de la gente que quizás nos mira o sigue con su vida, la de las iglesias de las ciudades y las capillas de los pueblos, la Asturias en la que pasamos frío y en la que juntos algunas veces nos derretimos.
Es mi Asturias la que comparto contigo bebiendo sidra a tu manera aunque verte me de risa y un poco de vergüenza… es la de los Portales en la que comimos y la de la Plaza del Ayuntamiento en la que tanto nos reímos, es la Asturias que contamos y a la que tanto tiempo dedicamos… es la Asturias de los túneles, de los acantilados, rutas junto al mar y caminos empinados…
Los sabores de Asturias para mi tienen denominación de origen, pero no llevan sello de calidad y no es necesario promocionarlos ni mostrarlos ni a propios ni a extraños, prefiero saborearlos clandestinamente a tu lado… sentados, tumbados o cogidos de la mano, en Asturias habrá mil productos del campo, de la mar y muchas carnes y quesos… pero el mejor postre siempre es y serán tus ojos brillantes y los besos…
La Asturias que más me gusta es la que quiero compartir “mañana” contigo, una Asturias con casa propia, con ese coche en ruta y a poder ser acompañados por ese “proyecto” del que tanto hemos hablado y que quizás no sea Reina ni Doña, pero sí será nuestra “princesa” y la mejor semilla que podremos dejar en esté Paraíso tan natural y verde como es el color esperanza…
La Asturias que hemos vivido muchas veces nos hace llegar tarde, otras veces nos muestra nuestros miedos al “mañana” y alguna vez nos separa y nos enfada, pero esa Asturias es la que nos une, aunque tú prefieras la ciudad y yo la vida de pueblo, es la que nos hace estar juntos aunque sea en medio de la nada o en esa Ciudad de Vacaciones fantasma… es la de los sonidos de la vida y la de los silencios cuando cae la noche…
Hoy es el Día de Asturias y no iremos de romería o de fiesta, quizás sigas molesta por cualquier cosa que haya hecho, que haya dicho o que no haya sabido decir, pero mi tierra no es lo mismo sin ti, pues tú vives en ella, y lo siento por el resto… pero aunque no nos llamemos Adán ni Eva yo sí comería la manzana “prohibida” para seguir compartiendo contigo nuestra vida.
Nacho Bermúdez
