El Gobierno israelí amenaza con ataques militares a Irán

Tel Aviv/Teherán, 5 jun (dpa) – El Gobierno israelí reaccionó hoy indignado y amenazó con ataques militares a Irán, después de que el ayatolá Ali Jamenei ordenara la víspera iniciar los preparativos para reanudar el enriquecimiento ilimitado de uranio en el caso de que fracase el acuerdo nuclear de 2015.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aseguró que Irán quiere producir «un arsenal de bombas nucleares» para destruir Israel, en un mensaje de video difundido hoy. «No estamos sorprendidos. No permitiremos que Irán obtenga armas nucleares».

El ministro de los Servicios Secretos, Israel Katz, señaló que si la cúpula de Teherán reanuda su programa de desarrollo de armas nucleares, «una coalición internacional liderada por Estados Unidos amenazará a Irán y después atacará militarmente», dijo a la web de noticias «Ynet».

El ministro de Defensa iraní, Avigdor Lieberman, calificó el anuncio de Teherán como «un signo de histeria y pánico masivo dentro de la cúpula iraní».

El ayatolá Jamenei ordenó el lunes a la organización nuclear nacional que comenzara hoy los preparativos técnicos para reanudar el enriquecimiento ilimitado de uranio, añadiendo que Teherán no podía confiar en ningún país y debía prepararse para el caso de que fracasara el tratado pese a las promesas de la Unión Europea (UE) y los intentos por mantenerlo a flote.

La Organización de Energía Atómica de Irán (AEOI) aseguró hoy que esos preparativos no violan los términos del acuerdo. Además, su líder Ali Akbar Salehi informó por escrito al respecto al Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) en Viena, que monitorea el cumplimiento de lo pactado.

El pacto firmado en 2015 por Irán con Estados Unidos, Rusia, China, Alemania, Francia y Reino Unido está en crisis después de que Washington decidiera abandonarlo de forma unilateral a comienzos de mayo. El resto de países quieren mantenerlo, pero aún no es seguro que lo consigan.

En ese acuerdo, y a cambio del levantamiento de las sanciones económicas contra el país persa, Irán se comprometió a renunciar a una bomba nuclear y a someterse a estrictos controles. La OIEA ha señalado que el país ha cumplido hasta ahora todos sus compromisos.

Entre ellos contemplaba que en los primeros diez años de vigencia del acuerdo Irán desmantelara más de dos terceras partes de sus capacidades para enriquecer uranio y que sólo enriqueciera a un 3,67 por ciento, un nivel sólo apto para utilizar en centrales de energía nuclear. Para fabricar una bomba se requiere uranio enriquecido al 90 por ciento.

El líder de la organización nuclear nacional iraní Salehi matizó que los nuevos planes son preparativos prácticos que el país persa está haciendo para el caso de que fracase el acuerdo nuclear. Por ejemplo, se aumentará la capacidad de producción del «yellowcake» o «pasta amarilla», un concentrado de mineral de uranio considerado material base para la fabricación de combustible nuclear.

Además, el país quiere también forzar la fabricación de centrifugadoras más rápidas para enriquecer uranio si fracasa el acuerdo nuclear. El nuevo centro podría estar listo en algunos meses.

Pese a ello, Salehi manifestó su esperanza en que el acuerdo nuclear pueda mantenerse vivo, como ha manifestado el resto de firmantes. El acuerdo es «bueno para Irán, la región y el mundo entero» y también para la implementación del acuerdo de no proliferación nuclear, dijo citado por la agencia de noticias IRNA.

Expertos de la UE están dispuestos a analizar el anuncio de Irán, señaló una portavoz, que reiteró que el OIEA ha confirmado ya en 11 ocasiones que el país ha persa ha cumplido sus compromisos.

«Respetaremos el acuerdo mientras Irán también lo haga», dijo. La UE hará todo lo que esté en sus manos para respetar las ventajas económicas que le reporta el acuerdo. Por ejemplo, se está trabajando en activar el estatuto de bloqueo que defiende a las empresas europeas de las sanciones estadounidenses que el presidente Donald Trump volvió a implementar tras salir del acuerdo.

Además, la UE quiere que el Banco Europeo de Inversiones (BEI) pueda apoyar también en el futuro las inversiones de la UE en Irán.

Irán ya ha dejado claro que su permanencia en el acuerdo depende de que el resto de firmantes consigan mantener los beneficios económicos que el pacto le reporta.