Berlín, 27 abr (dpa) – El Gobierno alemán aprobó hoy en su reunión de gabinete un paquete de ayuda a los ciudadanos por valor de miles de millones de euros, para hacer frente a la fuerte subida de los precios de la energía a causa de la invasión rusa en Ucrania.
Se beneficiarán de ello tanto quienes viajen en tren como en coche y casi todos los trabajadores. Pese a ello, hay dudas de si será suficiente para amortiguar el alza de los precios, lo que dependerá en última instancia del curso de la guerra y de una posible interrupción del suministro de gas ruso.
Los líderes de la coalición formada por socialistas (SPD), verdes y liberales (FDP) habían acordado este paquete ya a finales de marzo, cuando quedó claro el impacto que tendría la guerra en los precios de la energía, la calefacción y también el supermercado en Alemania.
En febrero ya se aprobó la supresión de la tasa para la transición energética en la factura de la luz a partir de julio. Los planes se debatirán en el Bundestag mañana jueves.
Las medidas de alivio para los consumidores incluyen una reducción del impuesto a los combustibles durante un periodo limitado de tres meses, de junio a agosto, en la medida en que las directivas de la Unión Europea lo permiten. Se espera que las empresas lo transmitan a sus clientes.
Según el Ministerio de Finanzas, el tipo impositivo de la gasolina se reducirá en 29,55 céntimos por litro, y el del gasóleo en 14,04 céntimos. Sin embargo, esta reducción es polémica porque tras subir a mediados de marzo hasta los 2,203 euros por litro, la gasolina super ha bajado y se paga ahora a 1,954 euros, según el club automovilístico ADAC.
Para compensar la subvención de las energías fósiles por el abaratamiento del combustible, el Gobierno también bajará la tarifa del transporte público. Desde junio hasta finales de agosto, los pasajeros de todo el país podrán viajar por 9 euros al mes en el transporte local y regional, mucho menos que con los billetes mensuales habituales.
Los trabajadores por cuenta ajena sujetos al impuesto sobre la renta recibirán además 300 euros brutos una única vez para compensar los elevados costes energéticos, que serán añadidos por el empleador al salario. En el caso de los autónomos se reducirá el anticipo de impuestos.
El impuesto sobre la renta se aplicará entonces incluyendo esos 300 euros, por lo que los ciudadanos con un tipo impositivo alto recibirán menos y los de menores ingresos, más.
Las organizaciones sociales han criticado, sin embargo, que los pensionistas queden excluidos de la medida, cuando les haría mucha falta sobre todo a los que tienen las pensiones más bajas. Tampoco hay garantía de que los 300 euros sean suficientes para comensar las subidas, sobre todo en los precios de la calefacción.
Para ayudar a las familias se incrementará por una única vez asimismo en 100 euros la prestación por cada hijo. También recibirán 100 euros adiciones por única vez los beneficiarios de prestaciones sociales.
Las ayudas están contenidas en un presupuesto suplementario presentado por el ministro de Finanzas, Christian Lindner, que incluye casi 40.000 millones de euros (42.400 millones de dólares) de deuda adicional y que también contempla otras medidas como la ampliación de la gratuidad de los test de coronavirus o la ayuda humanitaria y por la llegada de refugiados.
Según los cálculos del Ministerio de Finanzas, la reducción temporal de los impuestos sobre la gasolina hará que el Gobierno federal deje de percibir unos ingresos fiscales de unos 3.150 millones de euros.
En total, el Gobierno quiere contraer este año 138.900 millones de euros de nueva deuda. El proyecto de presupuesto para 2022 ya se está debatiendo en el Parlamento, pero ahora se actualizará con este añadido.