‘El final de El Gallinero’ es el título del reportaje que estrena ‘Crónicas’. El poblado El Gallinero, en Madrid, ya no existe. Una pala mecánica derribo las últimas chabolas. Entre los restos de plástico y cartón podía verse algún juguete, cuadros y objetos personales.
Los técnicos aconsejaron a las familias que se llevaran lo imprescindible para no trasladar ninguna plaga a los pisos donde los realojaban. Porque allí se vivía en la miseria. Eran las últimas 30 familias de El Gallinero. Unas 110 personas, la mitad de ellos niños, de origen rumano y etnia gitana.
El Gallinero era una vergüenza difícil de ocultar. Allí vivían sin las condiciones de salubridad adecuadas. Sólo hace dos años se puso hormigón y se instalaron baños, pero ya habían pasado más de diez años habitando un barrizal en invierno, inundaciones y de ratas, soportando frío y calor extremo.
Durante estos años han pasado por allí distintas administraciones, ONG’s y voluntarios del movimiento vecinal y parroquial. El cura de la Iglesia de Entrevías, la de San Carlos Borromeo, asegura que con el realojo se les da una oportunidad para el futuro: “Las personas sólo podemos imaginar un futuro diferente al que vivimos, si tenemos unas condiciones mínimas. Y esas condiciones mínimas, en primer lugar, las facilita el tener una casa, el tener un techo. Por eso nos parece que dar una oportunidad a estas familias es procurarles un futuro -sobre todo a sus hijos- mejor que el que han tenido sus padres o sus abuelos”.
‘El final de El Gallinero’ es un reportaje con guión de Fátima Hernández y realización de Carlos Gómez López.