Duros disturbios tras la manifestación contra los recortes de Rajoy

6076185wMadrid, 22 mar (dpa) – Una multitudinaria protesta contra los recortes del gobierno conservador de Mariano Rajoy terminó en la noche de hoy en Madrid con fuertes disturbios y un balance oficial provisional de más de 62 heridos, medio centenar de ellos policías, y 19 manifestantes arrestados.

El centro de la capital española se convirtió en escenario de una batalla campal entre agentes de policía y grupos de manifestantes que lanzaron contra ellos botellas y piedras.

«Han actuado con verdadera saña contra la policía», dijo la delegada del gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, a la televisión privada La Sexta. Habló de numerosos destrozos de mobiliario urbano y de cristaleras de sucursales bancarias. Y cifró en más de 50 los policías heridos, uno de ellos de gravedad, y en 12 los manifestantes. Según dijo, los arrestados fueron al menos 19.

Participantes en la protesta denunciaron por su parte fuertes cargas policiales contra personas que no tomaban parte en actos violentos y el uso de gases lacrimógenos para dispersarlos.

Los disturbios ensombrecieron una de las mayores protestas de los últimos meses contra el gobierno de Rajoy por la gestión de la crisis económica. Una manifestación que se produce en un momento en el que el gobierno habla de recuperación, pero en el que el desempleo sigue siendo desorbitado, con más de un 26 por ciento de trabajadores sin empleo.

Decenas de miles de personas protestaron contra los recortes del Ejecutivo del Partido Popular (PP) en el centro de la ciudad, donde horas antes habían confluido seis columnas de manifestantes que hace un mes iniciaron un avance hacia Madrid desde distintos puntos del país bajo el nombre de «marchas de la dignidad».

Bajo el lema «Pan, trabajo y techo para todos y todas», la protesta aunó a diversos colectivos, como el de los indignados y el antidesahucios, así como a sindicatos y organizaciones de estudiantes universitarios, entre otros.

Marcharon desde la estación de Atocha hasta la plaza de Colón, denunciando que una parte de los españoles vive una «emergencia social» por los recortes del Ejecutivo conservador.

«Están causando sufrimiento, pobreza, hambre e incluso muertes, y todo para que la banca y los poderes económicos sigan teniendo grandes beneficios a costa de nuestras vidas», señaló un manifiesto.