(dpa) – Las malas noticias provenientes de Estados Unidos dejaron hoy en estado de schock a los inversores del Deutsche Bank, la mayor entidad bancaria europea.
La multa que el Gobierno de Barack Obama ha fijado para el grupo bancario por negocios hipotecarios dudosos ha sido más alta de lo esperado y ha derivado en una jornada de grandes caídas de la compañía en la bolsa alemana.
No en vano, las autoridades estadounidenses exigen al Deutsche Bank el pago de 14.000 millones de dólares (12,5 millones de euros).
Tras conocerse el importe de la penalización, las acciones de la entidad dieron por terminado el intento de recuperación experimentado en las últimas semanas y el valor de los bonos del banco alemán cayó casi un siete por ciento durante la mañana de hoy, para situarse en 12,20 euros, un nivel similar al registrado a mediados de agosto.
El bajo nivel de los intereses, así como los litigios en los que está envuelto en la actualidad comprometen fuertemente las cuentas de resultados del Deutsche Bank, entidad que el pasado año registró un récord de pérdidas.
El grupo bancario está en la actualidad considerado como una de las entidades europeas peor capitalizadas, por lo que muchos expertos consideran que muy pronto la directiva del Deutsche Bank comenzará a hablar de una ampliación de capital.