De la decisión al anuncio : Crónica de la abdicación de un rey

6324120wrey(dpa) – A Juan Carlos I le hubiera gustado cumplir 40 años en el trono y entonces, abdicar. La decisión de renunciar a la Corona la tenía tomada desde su 76 cumpleaños, este 5 de enero. La pregunta era cuándo. El 2 de junio de 2014 fue finalmente la fecha que entró en los libros de Historia de España.

«O ahora, o habrá que esperar dos años», dijo a quienes conocían su intención, según publicó hoy el diario «El Mundo».

2015 es un año lleno de elecciones -municipales, autonómicas y generales- y no quería interferir.

En 2014 había citas políticas importantes que aconsejaban que no hubiera ruido: las elecciones europeas del 25 de mayo con su campaña y su larguísima precampaña electoral, el debate de los presupuestos generales del Estado después del verano español o el 9 de noviembre, fecha del desafío catalán con un referéndum independentista que el gobierno considera ilegal y quiere frenar.

Por otro lado, la dimisión de Alfredo Pérez Rubalcaba, el líder del Partido Socialista (PSOE), se materilizaría en julio y la prudencia política aconsejaba tenerlo a él al frente de la principal fuerza de la oposición en el momento de la abdicación porque su respaldo a la monarquía es seguro.

El rey daba vueltas a la abdicación ya desde tiempo antes de su 76 cumpleaños, según «El Mundo», que cita a amigos del monarca. Tomada la decisión en enero, el primero al que se la comunicó fue al futuro rey, su hijo el príncipe Felipe.

Llevaba dos años de problema en problema, desde la famosa cacería en Botsuana en la que se rompió la cadera en abril de 2012.

El episodio africano abrió por un lado un periodo de varias operaciones y el declinar de su salud y, por otro, asestó un fuerte golpe a su imagen y a la de la Corona, ya afectada por el escándalo de corrupción en torno a su yerno, Iñaki Urdangarin.

El rey quería dar el paso en un buen momento físico. El cirujano que estuvo al frente de las dos últimas operaciones, en las que le sustituyó en dos tiempos la prótesis de la cadera izquierda, que se había infectado, confirmaba el 31 de marzo que el monarca se recuperaba bien.

Fue por esas fechas cuando anunció su intención de dejar el trono al presidente del gobierno, Mariano Rajoy, y pocos días después hizo lo mismo con el líder del PSOE. El rey mantuvo durante meses el gran secreto. Y cuando lo contó, el círculo fue muy pequeño.

Según el diario «El País», buscó la fecha con el príncipe Felipe y juntos barajaron tres opciones: la última semana de mayo, la primera de junio y la segunda de este mes. El viernes de la semana pasada, la decisión estaba tomada y padre e hijo prepararon todo para el lunes, cuando el príncipe volviera de la toma de posesión del nuevo presidente de El Salvador.

A las 11 de la mañana de ese día, media hora después de que Rajoy sorprendiera a España anunciando la abdicación del único rey que ha tenido la España democrática, el monarca comenzaba a grabar el mensaje que dos horas después vieron los españoles por televisión.

Tardó más de lo habitual porque hubo que interrumpir la grabación en varias ocasiones. Juan Carlos I de España se emocionaba al proclamar su retirada tras 39 años de reinado. «Quiero lo mejor para España, a la que he dedicado mi vida entera», dijo a los españoles.

Por Sara Barderas