Singapur, 11 may (dpa) – El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo hoy que espera que la futura reunión que mantendrá en Singapur con el líder norcoreano, Kim Jong-un, contribuya a instaurar una paz y seguridad duradera en la península coreana.
El presidente estadounidense hizo los comentarios durante una conversación telefónica con el primer ministro singapurense, Lee Hsien Loong, informó el Ministerio de Exterior.
La cumbre será la primera entre un presidente estadounidense y un líder norcoreano. Trump anunció la víspera que el encuentro tendrá lugar el 12 de junio en Singapur.
Lee se refirió a la cumbre como un «evento histórico y crucial» durante la llamada y añadió que es un honor para Singapur albergarla y que hará todo lo posible por facilitar «una reunión tranquila y exitosa», según el comunicado.
Por su parte, el ministro de Exteriores singapurense dijo que su país estaba «contento» de haber sido elegido como anfitrión para la histórica cumbre y que esperaba que esta reunión suponga un avance «en las perspectivas de paz en la península coreana».
La Casa Blanca alabó la neutralidad de Singapur y su habilidad para garantizar la seguridad de ambos líderes para justificar la elección del país como anfitrión.
Se espera que Trump y Kim conversen sobre la promesa de Corea del Norte de poner fin a su programa de armas nucleares, que provocó la escalada de la tensión entre Washington y Pyongyang y provocó la imposición de sanciones internacionales contra Corea del Norte.
La cumbre tendrá lugar después de que Kim se reuniera por primera vez con el presidente surcoreano, Moon Jae-in, en el pueblo fronterizo de Panmunjom el 27 de abril. En ella acordaron alcanzar una serie de objetivos históricos como la desnuclearización de la península y el fin oficial de la guerra de Corea de 1950-1953.
Lee también invitó a Trump a realizar una visita de Estado a Singapur además de asistir la cumbre de la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (Asean) y Estados Unidos. Trump prometió que haría todo lo posible por hacerlo.
Corea del Sur, Japón y China celebraron en las últimas horas la fijación de la fecha y el lugar para el primer encuentro entre Estados Unidos y Corea del Norte.
«China celebra los avances positivos que han conseguido Corea del Norte y Estados Unidos en la preparación del encuentro», dijo hoy en Pekín el portavoz del Ministerio de Exteriores, Geng Shuang.
«Esperamos que la cita conduzca a resultados positivos y sea una importante contribución a la demanda de desnuclearización en la península coreana», añadió.
«Lo celebramos (la fijación de la fecha). Esperamos fervientemente que este diálogo histórico entre Estados Unidos y Corea del Norte sea una oportunidad para avanzar en el problema de los programas de armas nucleares y misiles y sobre todo en la importante cuestión de los secuestros (de japoneses por parte de Corea del Norte)», dijo el jueves el primer ministro japonés, Shinzo Abe, según informaron medios nipones.
«Esperamos que esta cumbre sea un éxito para lograr la desnuclearización de la península coreana así como una paz duradera», declaró en la madrugada de hoy un portavoz del gabinete presidencial en Seúl.
Para Tokio, el tema de los secuestros de campesinos japoneses por parte de Corea del Norte en los años 70 y 80 es el mayor obstáculo para normalizar las relaciones con Pyongyang. Los deportados debían enseñar a hablar japonés a espías norcoreanos y ayudarles a comportarse como japoneses.
Hasta 2002 Corea del Norte no admitió haber secuestrado a 13 personas. Cinco de ellas pudieron volver a Japón. Aunque Corea del Norte asegura que los ocho restantes han muerto y que no hubo más secuestros, Tokio habla de 17 campesinos secuestrados y exige explicaciones a Pyongyang.
Mientras tanto y tal y como estaba previsto, Corea del Sur y Estados Unidos comenzaron unas maniobras de defensa antiaérea de dos semanas, «Maximum Thunder», confirmaron fuentes del Ministerio de Defensa en Seúl. Unos 100 aviones de guerra participarán en los ejercicios, informaron medios surcoreanos.