Cuarón, Payne, Russell y McQueen piden paso con permiso de Scorsese

cineMadrid/Los Angeles, 23 feb (dpa) – Una nueva generación de directores se abre camino en Hollywood con paso firme: Alfonso Cuarón, David O. Russell, Steve McQueen y Alexander Payne podrían marcar el cine que venga en los próximos años y su talento se ensalza ahora con una candidatura al Oscar a la mejor dirección, honor que comparten con todo un veterano: Martin Scorsese.

El mexicano Cuarón, proclamado mejor director con «Gravity» por numerosas asociaciones de críticos estadounidenses, se ha llevado ya el Globo de Oro y hasta el premio del Sindicato de Directores estadounidense, una suerte de oráculo de cara a los Oscar. A continuación el resto de nominados:

STEVE McQUEEN: El director británico nacido en Londres en 1969 es el más joven de los candidatos y el único debutante en esta categoría. El cineasta, que comparte nombre y apellido con un sexsymbol y rebelde de Hollywdood, tiene como carta de presentación un trío de ases: «Hunger», «Shame» y «12 Years a Slave», la película con la que aspira ahora a esta preciada estatuilla (y a otras ocho más). El director ha elevado el dolor y el sufrimiento a la categoría de arte tal como demostró con «Hunger», con la que consiguió destacar en la vorágine de Cannes en 2008 mostrando la huelga de hambre de los prisioneros republicanos en Irlanda del Norte; en «Shame» agitó y emocionó con una relación incestuosa, mientras que con «12 Years a Slave» revive el drama de los esclavos en Estados Unidos. El director, que proviene del mundo del arte -donde también destacó llegando incluso a ganar el premio Turner en 1999 por una video instalación- sería el primer negro en alzarse con la estatuilla dorada. Hasta la fecha sólo estuvieron nominados John Singleton («Boyz n the Hood», en 1992) y Lee Daniels («Precious», en 1991).

ALEXANDER PAYNE: La comedia agridulce es el medio natural en el que se mueve el estadounidense Alexander Payne, (Nebraska, 1961), que ya consiguió dos estatuillas como guionista adaptando «Sideways» y «The Descendants», su último y mayor éxito y el que le ha permitido conseguir financiación para convertir en realidad un sueño personal: rodar una película en blanco y negro en su Omaha natal, ubicada en «Nebraska», el estado norteamericano que da nombre a su película y con la que este año se apunta su tercera nominación como director. Payne seguramente no esperaba todo lo que ya ha conseguido con su séptima película, una pequeña producción que ya debutó con fuerza tras ser seleccionada para el Festival de Cannes, donde su protagonista Bruce Dern se llevó el premio al mejor actor y ahora aspira a seis estatuillas. Aunque no figura entre los favoritos, el director podría dar la sorpresa de la noche.

DAVID O. RUSSELL: Desde que en 2010 pisara por primera vez la alfombra roja de los Oscar con «The Fighter», que aspiraba a siete estatuillas y recogió dos, David O. Russell parece abonado a los premios de la Academia de Cine de Hollywood. El neoyorquino nacido en 1958, tiene fama de ser duro con los actores, pero consigue que éstos se lleven a casa la estatuilla que él se le resiste. «American Hustle», que lidera las nominaciones (10) junto con «Gravity», supone su tercera oportunidad de alzarse con un premio que, según las casas de apuestas, podría hacerse de nuevo de rogar. Russell, que al igual que Payne suele escribir las películas que dirige y además se desenvuelve con soltura en la comedia agridulce, debutó con «Spanking Monkey» (1994), una comedia que se llevó el premio del público en Sundance y fue distinguida como mejor ópera prima por los Independent Spirit Awards. La buena recepción de este primer trabajo hizo que Ben Stiller se pusieran a sus órdenes en «Flirting with Desaster», pero realmente la película que lo encaminó a la fama fue su tercer trabajo: «Three Kings», con George Clooney encabezando el reparto. Después llegaron las alabadas «The Fighter» y «Silver Linings Playbook», que a Jennifer Lawrence le valió un Oscar.

MARTIN SCORSESE: A pesar de ser uno de los directores más prestigiosos del panorama estadounidense con alguno de sus trabajos considerados ya un clásico del cine, sorprende que Martin Scorsese tan sólo haya recogido una vez la estatuilla al mejor director. Y fue hace apenas siete años con «The Departed», considerado un trabajo menor dentro de su amplia trayectoria. Martin Charles Scorsese, el más veterano de los candidatos, nació en el barrio neoyorquino de Queens en 1942. Casi cuatro décadas después consiguió su primera candidatura a mejor director con «Raging Bull». Siguió en la categoría con «The Last Temptation of Christ», «Goodfellas» y otros trabajos. La mayor decepción se la debió llevar con «Gangs of New York», que en 2003 le hizo recoger el Globo de Oro pero no el Oscar al mejor director. Acabó convirtiéndose en eterno candidato hasta que rompió el maleficio con una historia de gánsters y, aunque ahora cambia en hampa del crimen organizado por el reino de la corbata y el traje a medida de Wall Street, Scorsese vuelve a brillar fijando su cámara en el mundo de los «mafiosos» de las finanzas con «El lobo de Wall Street», que aspira en total a cinco Oscar.

Por María Luz Climent Mascarell