Managua, 16 jun (dpa) – El Gobierno de Nicaragua llevó hoy adelante una segunda sesión del diálogo nacional con la oposición, que protestó por los nuevos hechos de violencia en el país, entre ellos la muerte de seis miembros de una familia en un ataque en el que se quemó su vivienda en Managua.
La oposición acusó al Gobierno de violar el «cese a la violencia» pactado la víspera, al ordenar ataques en varias ciudades, entre ellos el incendio de una vivienda en un barrio del oriente de la capital, donde fallecieron cuatro adultos y dos niños de una misma familia.
El Gobierno de Ortega y la opositora Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia reanudaron el viernes el diálogo nacional, con mediación de la Iglesia católica, para intentar resolver la crisis que sacude al país desde hace casi dos meses.
El diálogo se había iniciado el 16 de mayo y se suspendió el 23 por falta de consenso sobre la agenda a discutir. Este sábado se acordó la formación de tres comisiones de trabajo.
El canciller y jefe de la delegación gubernamental, Denis Moncada, leyó un informe policial y tomó distancia de lo ocurrido, al atribuir el incendio a «grupos de encapuchados que han estado acechando la zona» y lamentó que se continúe privando de la vida a ciudadanos.
El portal oficial «El 19» dio cuenta del incendio y lo atribuyó a «grupos vandálicos de la derecha», en alusión a opositores al Gobierno de Daniel Ortega.
Por su parte, el productor Michael Healy, miembro de la Alianza Cívica, acusó a la policía y a grupos paramilitares de ser responsable de los hechos y dijo que «las pruebas son suficientes y están en todas las redes sociales».
«Le pido al Gobierno que se pare la represión de una vez por todas, eso es lo que está pidiendo el pueblo y eso es lo que ustedes deberían de garatizarle al pueblo», respondió Healy.
El canal 15 de la televisión transmitió diversos videos filmados por vecinos que registran un fuerte despliegue de policías uniformados y otros hombres encapuchados y armados con fusiles de guerra, antes y durante el ataque a la casa.
«Condenamos este acto de terror q es un crimen de lesa humanidad y q no puede quedar impune», dijo el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, en un tuit.
También el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh, independiente) expresó en un comunicado «su más enérgica condena» por el ataque e incendio, que calificó como un hecho «violatorio de las normas nacionales e internacionales de protección a la niñez».
«Este crimen revela un escalamiento de la brutal represión del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo», añadió el Cenidh.
Los medios locales y organismos de derechos humanos también reportaron ataques de grupos armados y policías en Managua, León (noroeste), Nandaime y Masaya (Sur).
Al concluir la jornada, la Conferencia Espiscopal a cargo de la mediación anunció la creación de tres comisiones de trabajo, formadas cada una por tres delegados del Gobierno y tres de la Alianza Cívica, con los obispos como testigos y organismos internacionales de derechos humanos como acompañantes.
Una de las comisiones, la de verificación y seguridad, se encargará de garantizar el cese de la violencia y el retiro de los «tranques» (retenes) que los campesinos colocaron en carreteras del país tras el inicio de las protestas el pasado 18 de abril.
En tanto, la comisión de democratización discutirá la renuncia del actual tribunal electoral, acusado de fraude por la oposición, y la preparación de elecciones generales el 31 de marzo de 2019, lo que anticiparía los comicios presidenciales previstos para 2021.
La tercera comisión, la judicial, trabajará en el tema de la renuncia y sustitución de los actuales magistrados de la Corte Suprema de Justicia, señalados de favorecer con sus actuaciones a Ortega.
El obispo de Matagalpa (norte), monseñor Rolando Álvarez, informó que el diálogo continuará el próximo lunes con los debates en comisiones y el martes con la discusión en plenario.
No obstante, el canciller Moncada advirtió que el Gobierno sólo discutirá sobre democratización y otros temas previstos «respetando la Constitución y el Estado de Derecho».
«No aceptaremos imposiciones que rompan el ordenamiento jurídico y las reglas del juego establecidas para cambiar gobiernos a través de elecciones», dijo Moncada en alusión a los reclamos de la oposición, que exige la renuncia de Ortega.
La crisis que sacude al país, que ya deja al menos 200 muertos según organizaciones de derechos humanos, comenzó el 18 de abril, cuando estudiantes iniciaron una protesta contra Ortega que se extendió por la violenta acción policial y de grupos de choque afines al Gobierno. Las autoridades confirman hasta ahora sólo 46 fallecidos.
Por Johnny Cajina (dpa)