Crece la presión sobre la OEA para que aborde la crisis en Nicaragua

Washington, 3 jun (dpa) – Con decenas de muertos en el marco de las protestas contra el Gobierno en Nicaragua, la exclusión de la crisis del país centroamericano en la agenda de la Asamblea General de la OEA generó críticas y malestar que se han convertido en presión sobre la organización panamericana.

La víspera de la inauguración del encuentro, centrado en la situación en Venezuela, algunas delegaciones de los países miembro mantuvieron hoy contactos sobre la posible inclusión del tema nicaragüense en la agenda, según pudo saber dpa. «Se está conversando», dijo una fuente diplomática.

Mañana hay prevista una protesta de nicaragüenses a las puertas de la Organización de Estados Americanos (OEA) coincidiendo con la inauguración de la Asamblea General, después de la cual se votan oficialmente los temas a tratar durante los dos días de reunión.

En medio de una fuerte lluvia primaveral, hoy se congregaron ante la sede medio centenar de nicaragüenses, mientras otros mostraron mensajes impresos durante un encuentro del secretario general, Luis Almagro, con representantes de la sociedad civil americana previo a la Asamblea. «Por una Nicaragua libre. Alto a la represión», reclamaron.

La oposición nicaragüense que ha viajado a Washington para intentar que la Asamblea General aborde la crisis en su país confía en el Grupo de Lima para su incorporación en el debate de la cita anual más importante de la OEA.

«Estamos esperando que haya un país que presente la situación y que haya otro que lo apoye», dijo a dpa la abogada Azahálea Solís, delegada de la sociedad civil en el diálogo nacional que comenzó a mediados de mayo en Nicaragua con la mediación de la Iglesia católica. Solís indicó que ve posibilidades de que mañana lunes se apruebe el tema en la agenda en una reunión previa de cancilleres.

Los opositores han mantenido desde su llegada a Washington reuniones con organizaciones de derechos humanos y tenían previsto verse en la tarde de hoy con representantes de delegaciones de países miembro.

La Asamblea General, en la que se reúnen los ministros de Exteriores de los 34 socios, será inaugurada mañana por Almagro y estará centrada en Venezuela.

Estados Unidos y el Grupo de Lima, conformado por otros 14 países críticos con Nicolás Maduro, buscan una dura resolución de condena del mandatario, que acaba de ser reelegido en unos comicios que estos 15 miembros de la OEA han rechazado por falta de garantías democráticas. Washington pretende que el texto vaya más allá e inicie el proceso de suspensión de Venezuela en la organización, según recoge el último borrador al que ha tenido acceso dpa.

La OEA no ha celebrado hasta ahora un solo consejo permanente sobre la crisis de Nicaragua y ni Almagro ni ningún país propuso en las reuniones preparatorias de la Asamblea que fuera un tema.

«Los ministros de Relaciones Exteriores deberían discutir la crisis de derechos humanos en Nicaragua y hacer un llamado urgente a que el Gobierno del presidente Daniel Ortega cese los abusos contra la población, incluyendo el uso desproporcionado de la fuerza contra manifestantes y la violencia de grupos simpatizantes del Gobierno», urgió hoy José Manuel Vivanco, director para las Américas de HRW.

Almagro ha sido muy criticado por la oposición venezolana, que ha llegado a acusarlo de doble rasero con Ortega e incluso de apoyar al ex guerrillero sandinista. «Condenamos el uso de la fuerza contra manifestantes y exigimos se frene la violencia en #Nicaragua ya», tuiteó él hoy mientras se producían las protestas.

Almagro dice que Nicaragua no es Venezuela y, aunque insiste en una salida electoral en el país centroamericano, rechaza los comicios inmediatos que pide parte de la oposición porque, dice, antes debe concluir la reforma del proceso electoral en la que la OEA trabaja desde hace meses con Ortega. El horizonte es 2021.

En varias intervenciones, los representantes de la sociedad civil exigieron hoy al político uruguayo «dejar de favorecer a Ortega».

«Esta grave situación que usted conoce bien, doctor Almagro, no puede obviarse en la agenda de la Asamblea, que debe exigir al Estado de Nicaragua el cese de la represión», instó la presidenta del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos, Vilma Núñez.

El director del Instituto de Investigaciones y de Gestión Social de Nicaragua (INGES), Guillermo Incer, le reclamó posicionarse ante la crisis. «No permitiremos verlo a espaldas de Nicaragua. Su reponsabilidad es defender al pueblo y no a su gobernante», dijo.

La OEA reúne a todos los países del continente americano, aunque Cuba nunca pidió la reactivación de su participación después de que en 2009 se le levantara la suspensión que se le había aplicado en los años 60.

Por Sara Barderas y Tatiana Rodríguez (dpa)