El Principado ha informado durante la semana de la evolución de la calidad del aire en la zona central de Asturias, que ha experimentado una notable mejoría desde la declaración del estado de alarma por el coronavirus, el 14 de marzo, según se desprende del análisis realizado por la Consejería de Infraestructuras, Medio Ambiente y Cambio Climático.
El departamento que encabeza Juan Cofiño ha examinado los contaminantes que tienen mayor relación con las emisiones debidas al tráfico rodado y a la actividad industrial, mediante el estudio de los datos registrados en las estaciones ubicadas en Gijón, Avilés, Oviedo y las cuencas mineras.
Así, la concentración de dióxido de nitrógeno (NO2), uno de los gases contaminantes que miden las estaciones de calidad del aire de la red del Principado y que está muy ligado al tráfico urbano, ha disminuido hasta el 68% en Gijón, el 62% en Mieres y el 50% en Oviedo, Sama y La Felguera.