Madrid, 6 feb (EFE).- Cinco de cada diez mayores, el 49,3 %, considera que su nivel económico ha empeorado tras la jubilación, mientras que cuatro de cada diez (40,6 %) piensa que es más o menos el mismo, frente a tan solo el 7,5 % que asegura que ha mejorado.
Así lo refleja el último Barómetro del Mayor que realiza el instituto de opinión Simple Lógica para Unión Democrática de Pensionistas (UDP) sobre distintos temas que afectan a los mayores.
Del total de los mayores españoles, casi seis de cada diez ha conseguido ahorrar durante su vida laboral mientras que tres de cada diez (29,4 %) no pudo hacerlo por falta de recursos.
Por comunidades, Andalucía (36,3 %), Cataluña (35,8 %) y Castilla y León (35,6 %) registran los porcentajes más altos de mayores que no pudieron ahorrar durante su vida laboral por falta de recursos suficientes.
Ante estos datos, el presidente de UDP, Luis Martín Pindado, considera necesario «sensibilizar a los ciudadanos de la importancia de prever económicamente el tiempo de retiro», según ha señalado en una nota en la que, además, insta a «proteger y promover el empleo en edades avanzadas, para evitar la creación de nuevas bolsas de pobreza entre los jubilados».
Entre los mayores que piensan que su nivel económico ha empeorado, el porcentaje es superior entre los menores de 75 años (55,1 %) que viven en grandes ciudades(57,7%).
De este grupo, que reconoce que tras la jubilación puede «echar mano de sus ahorros», el 58,4 % ha conseguido ahorrar para la jubilación durante su vida laboral, aunque solo el 35,8 % está satisfecho con lo que acumuló, mientras que el 22,6 % no pudo ahorrar lo suficiente.
El 29,4 % de los mayores reconoce que intentó ahorrar pero su situación económica no se lo permitió, frente a sólo el 6 % que ni quiso ni se arrepiente de no haberlo hecho.
El perfil de quienes no pudieron ahorrar es el de una mujer (34 %) mayor de 75 años (35,1 %), con estudios primarios (37,8 %) y residente en Andalucía (36,3 %), Cataluña (35,8 %) y Castilla-León (35,6%).
Por el contrario, el de quienes ahorraron satisfactoriamente es el de un hombre (44,2 %), con estudios secundarios (44,7 %) y universitarios (54,3 %), con alta capacidad de gasto (62 %) y que vive en Madrid (53,4 %) y Valencia (53,2 %).
En cuanto a los productos de ahorro en los que invirtieron los mayores un 84 % lo hizo en la vivienda habitual; un 32,9 % en cartillas de ahorro o imposiciones a plazo fijo; un 17,7 % en segunda vivienda o sector inmobiliario; un 17,1 % en planes de pensiones o seguros de vida; un 13,9 % en dinero en efectivo; un 13,3 % en acciones o depósitos bancarios y un 5,1 % en oro, joyas u obras de arte.
En perfil de los ahorradores también es diferente en función del producto elegido para ahorrar.
Así, en vivienda habitual no hay diferencias reseñables de sexo, edad o lugar de residencia, mientras que las cartillas de ahorro fue la opción mayoritaria de quienes tienen estudios secundarios, alta capacidad de gasto y viven en Barcelona o Madrid, al igual que la opción de compra de segunda vivienda, la imposición en planes de pensiones o productos de inversión.
En estos dos últimos productos destacan por haber sido elegidos, generalmente, por los mayores con estudios universitarios.
Este colectivo también es el que más invierte en oro y obras de arte, y dispone de ahorro en efectivo, opciones elegidas preferentemente también por aquellos mayores con alta capacidad de gasto y que viven en Madrid, Valencia y Castilla-León.