(dpa) – Tiene que ser crujiente por fuera y bien finito por dentro. En el imaginario centroeuropeo, cuando se tiene hambre, no hay mejor forma de poner remedio que con un «schnitzel», un filete empanado, acompañado de ensalada de patatas o patatas fritas. Para que el «schnitzel» quede realmente perfecto, se pueden seguir algunos trucos.
Consejo 1: hacer uno mismo el pan rallado
Si al comensal le gusta que la envoltura del filete sea realmente crujiente, lo mejor es rallar pan blanco que ya esté duro y meterlo en una bolsa de plástico. Se machaca la bolsa con una sartén o un objeto contundente y pesado y, finalmente, se aplasta la masa con un rodillo para que quede aún más fina, explica la revista «Lecker» (edición de marzo de 2021)
Consejo 2: aplastar un poco la chuleta
Solo una chuleta que ha sido aplastada de forma uniforme se convierte en una chuleta tierna. El grosor ideal es de cinco milímetros. El truco para saber si se ha acertado en la medida es colocar el celular junto a la pieza de carne. El móvil tiene que ser más alto que la chuleta.
Consejo 3: sin presionar
Al empanar, es mejor no presionar demasiado la carne. El empanado debe quedar suelto alrededor de la carne para que quede bien esponjoso.
Consejo 4: Empezar rápido
Tras empanar la carne, es mejor freírla inmediatamente, ya que de lo contrario la cobertura de pan rallado se humedecerá y se acartonará.
Consejo 5: La mejor grasa para freír
Según los expertos, la mejor experiencia de sabor se obtiene con la mantequilla clarificada. Puedes saber si está lo suficientemente caliente haciendo la prueba del palito: en cuanto se ponga el palito de madera en la grasa, deberían aparecer pequeñas burbujas en ella.