La gastronomía de la que se puede disfrutar en España es un verdadero lujo. Cualquier viajero que haya probado los platos típicos de otros países acaba recordando por qué la dieta mediterránea triunfa en todo el planeta y es referente de muchos grandes chefs.
La fruta, verdura, carne y pescado, junto con el aceite de oliva permiten a quienes se ponen al frente de los fogones hacer verdaderos manjares que enganchan a los más preocupados por la alimentación.
La dieta ideal no solo para el organismo sino también para la sostenibilidad, cada vez más importante para muchos, pasa precisamente por el uso de materias primas de gran calidad y de proximidad.
Nada como los diferentes caldos de verduras que pueden hacerse en un puchero tradicional para hacer que, ahora que la gripe ya ha sido declarada epidemia en nuestro país por el impacto que está teniendo este principio de año, uno empiece a encontrarse mejor bajo la manta.
Pero no solo eso, según los últimos estudios de expertos en nutrición, a la dieta de 2500 calorías que se recomienda para una persona adulta y sana, habría que doblar la fruta y verdura que actualmente se ingiere.
Gracias a poder apostar por un cultivo sostenible de proximidad, no solo la calidad de los productos mejoraría considerablemente, sino que se evitarían más de once millones de muertes prematuras y se emitirían muchos menos gases efecto invernadero de lo que actualmente se hace.
La dieta, causa de muchas enfermedades actuales
El tipo de alimentación que se ha instaurado en las rutinas de medio mundo, con cocina precocinada y congelada ha hecho que haya muchas dolencias actuales, realmente vinculadas a estas dietas, que están poniendo en riesgo la salud de la población mundial.
Colesterol, diabetes, obesidad y varios tipos de cáncer se han relacionado con las rutinas e ingestas diarias de alimentos no saludables, ultraprocesados y que no siguen las necesidades reales de la alimentación saludable.
Comprar en el mercado: más de moda que nunca
Pese a que todo el mundo conoce cuál es el tipo de alimentación saludable que hay que seguir, parece que resulte un verdadero esfuerzo volver a comer como lo hacían nuestros abuelos.
De hecho, hay una tendencia cada vez más de moda que se trata de imitar ese tipo de alimentación basada en el producto fresco y a la vuelta a los mercados, donde se exponen los productos de cercanía, de la zona y que garantizan una calidad y un proceso de cultivo y explotación acorde con la calidad.
Más allá de ponerse a contar calorías, hay que seguir las pautas de una alimentación variada. Eso no significa que pueda variarse hacia comida rápida, ultraprocesada, hipercalórica o incluso perjudicial sino a que, dentro del espectro de alimentos positivos para la salud, se pueden combinar al antojo y gusto de cada cual.
A diario, según los expertos, se recomienda tomar leche, cereales, frutas y verduras. Esa debe ser la constante, acompañada de legumbres, más pescado que carne y evitando los azúcares en la medida de lo posible.
No parece tan complicado. En un momento en el que el producto fresco se puede encontrar prácticamente en cualquier mercado, hay que volver a la tradición de acudir a ellos en vez de a las grandes superficies y concienciarse de que, pase lo que pase, el cuerpo necesita seguir una rutina saludable para poder rendir al máximo y evitar complicaciones.