España condena el cobarde atentado sufrido por la comisaría de policía de Barranquilla, que ha provocado la muerte de 5 policías y ha dejado 41 heridos.
El Gobierno quiere transmitir a las víctimas, a sus allegados, a la Policía de Barranquilla y a las autoridades colombianas, su solidaridad y la de la sociedad española, así como la confianza en que los autores de esta acción criminal serán sometidos a la justicia.
