La presidenta de la Junta, Susana Díaz, ha reivindicado una Europa solidaria y tolerante, que vuelva a ser ejemplo de «libertades y derechos en un espacio común». Así se ha pronunciado en el acto de traspaso de la Presidencia de la Conferencia de Asambleas Legislativas Regionales Europeas (CALRE) al presidente del Parlamento andaluz, Juan Pablo Durán. Esta nueva labor, ha destacado Díaz, «nos va a permitir que se escuche la voz de los andaluces en un momento difícil para España y Europa». Al acto también ha asistido el presidente del Senado, Pío García-Escudero.
La presidenta ha querido trasladar también un mensaje de «apoyo y solidaridad» a México, que «está viendo en sus fronteras cómo la intolerancia se abre hueco y se convierte en piedra».
Susana Díaz ha puesto en valor los elementos fundacionales de Europa, porque «son ya muchos los ciudadanos que en estos años de crisis han valorado si la Unión Europea está siendo fiel a sus principios, si está mirando al Sur». Especialmente se ha referido a los refugiados, y critica que Europa siga «siendo insensible mirando a nuestras fronteras».
La presidenta ha indicado la necesidad de que se escuche la voz de Andalucía, una comunidad superior en población y territorio a 17 países de la UE, en un órgano de coordinación de los parlamentos como la CARLE.
En esta línea, Díaz ha confiado en que en el próximo Comité de las Regiones «la impronta de los andaluces se haga notar. Se abre un tiempo diferente, los andaluces somos profundamente europeístas y no nos hemos sentido representados», añadió. «Un cambio de rumbo para que los parlamentos sean capaces de transmitir esa necesidad de mirar al Sur, mirar a los jóvenes y ser solidarios», insistió Susana Díaz, quien defendió una Europa que «sea de nuevo un ejemplo» y un lugar al que «todo el mundo quiera pertenecer».