El Papa Francisco ha rechazado este jueves las críticas a la reunión que mantendrá este viernes con la presidenta de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, subrayando que «si le usa o no le usa no es su problema».
«Parece que la piedra del escándalo es que yo reciba a la señora Bonafini. Sé bien quién es, pero mi obligación de pastor es la de comprender con mansedumbre», ha dicho en un correo electrónico a un amigo, publicado por la agencia estatal argentina de noticias, Télam.
«Esta señora, desde la plaza (de Mayo), me insultó varias veces con artillería pesada pero a una mujer a quien le secuestraron los hijos y no sabe cómo y cuánto tiempo los torturaron, cuándo los mataron y dónde los enterraron, no le cierro la puerta», ha agregado.
«Lo que veo allí es el dolor de una madre. Si me usa o no me usa no es mi problema. Mi problema sería no tratarla con la mansedumbre de pastor», ha remachado en su mensaje, tal y como ha recogido la citada agencia.
De Bonafini se mostró muy crítica en un primer momento con el nombramiento de Jorge Mario Bergoglio, al que llegó a insultar en varias ocasiones, si bien ha expresado su arrepentimiento por sus comentarios.
«Ya nos pasó con Néstor Kirchner, uno tiene que saber arrepentirse, y si uno se equivocó saber decir ‘me equivoqué’», dijo la presidenta de las Madres de Plaza de Mayo hace dos semanas.