La Fiscalía de Área de Gijón solicita penas de 32 años y 6 meses de prisión para un acusado de entrar a robar en cinco establecimientos de Gijón, con la cara cubierta y amenazando a sus víctimas con diferentes armas u objetos, según una nota de prensa del Ministerio público. La vista oral se celebrará este jueves en la Sección Octava de la Audiencia Provincial de Asturias, con sede en Gijón, a las 10.30 horas.
El Ministerio fiscal le imputa cinco delitos de robo -uno en grado de tentativa–, dos de detención ilegal y uno de lesiones. En todos los delitos concurre la agravante de disfraz. Además de la pena de cárcel, le pide una multa de 600 euros, que indemnice a las víctimas por los daños causados y al Sespa, por los gastos médicos que se acrediten.
De acuerdo al relato fiscal, sobre las 13.30 horas del 17 de marzo de 2015, el acusado entró tapándose la cara con una bufanda *en una panadería de la Avenida de Portugal, Gijón, y tras amenazar a su dueña con un cuchillo y conminarla a que se metiera en el almacén, se apoderó de unos 30 euros, su teléfono móvil, una cartera con 16 euros, un monedero con 5 euros, una alianza de oro y una sortija de oro, efectos valorados en 60 euros.
Asimismo, el imputado se ausentó tras cerrar con llave la tienda, dejando encerrada en el almacén a la mujer, a la que advirtió de que había otro individuo vigilando fuera y que si salía la mataría, de modo que tuvo que pedir ayuda a una viandante para que avisase a su marido, que consiguió finalmente abrir la puerta. La alianza y el anillo fueron vendidos por el acusado por 105 euros en un establecimiento de Gijón, que cumplió al respecto todos los requisitos legales, y donde fueron recuperados por la Policía.
En otro de los robos, ocurrido sobre las 11.00 horas del 18 de marzo de 2015, el acusado, que cubría su rostro con una braga, amenazó con una barra metálica a la propietaria de un estanco en la calle Rosario. En esa ocasión, consiguió apoderarse de 850 euros. A continuación, se ausentó dejándola encerrada con llave en el establecimiento, por lo que tuvo que desencajar la puerta para poder salir.
También le imputa la Fiscalía otro robo, sobre las 13.30 horas del pasado 19 de marzo de 2015, cuando el acusado accedió a una panadería de la calle Espronceda con su rostro cubierto con una capucha y una braga y, tras amedrentar a su dueña con un objeto punzante, se apoderó de 70 euros de la caja registradora.
Un día después, sobre las 13.40 horas, el imputado supuestamente accedió esgrimiendo un destornillador y con la cara tapada con un pasamontañas a una tienda de ropa de la calle Manuel Llaneza, con la pretensión de apoderarse de dinero, que no pudo conseguir por la oposición de la dependienta, a la que agredió. El hombre le causó lesiones de las que tardó en curar 105 días. Como consecuencia de los golpes propinados por el acusado, se extraviaron las lentillas de la mujer, valoradas en 120 euros.
Por último, la Fiscalía considera que, sobre las 11.00 horas del día 21 de marzo de 2015, el procesado accedió con el rostro tapado con una braga y portando un destornillador a un establecimiento de la calle Arroyo. Tras golpear a su dueña, se apoderó de unos 600 euros y de dos botellas de whisky y coñac valoradas en 64 euros. La mujer sufrió lesiones de las que tardó en curar 10 días. Igualmente le ocasionó daños en su ropa y gafas por importe de 200 euros, y el establecimiento sufrió daños tasados en 410 euros.
