Miguel Angel Revilla exige la adjudicación «ya» del primer tramo del tren de altas prestaciones desde Palencia

fotonoticia_20151007160239_800El presidente de Cantabria, Miguel Angel Revilla, ha reclamado este miércoles la adjudicación «ya» del primer tramo del tren de altas prestaciones desde Palencia a Reinosa, para que las obras comiencen en 2016.

«A ver quién gana las elecciones, pero cualquiera de los que vayan a gobernar España tiene el compromiso de comenzar la obra inmediatamente porque los proyectos están terminados por lo menos desde Palencia para empezar la obra».

Revilla ha realizado estas afirmaciones después de que el secretario general del PSOE y candidato a la Presidencia en las generales de diciembre, Pedro Sánchez, haya dicho que su partido se compromete a que «el AVE llegue a Santander», aunque sin ninguna referencia a plazos y financiación.

Tras recordar que en Cantabria «hemos aceptado» un tren de altas prestaciones que «no es exactamente un AVE», el también secretario general del PRC ha subrayado que «más allá de lo que diga lo que diga el señor Sánchez, o el señor Rajoy, lo que yo comprometo es que Miguel Angel Revilla no va a callar ni un momento hasta que vea las palas trabajando». «Ese es mi caballo de batalla», ha apostillado.

Así, ha recordado que esta obra «ya estuvo adjudicada en el año 2011, con la maquinaria en el terreno y con un kilómetro ya explanado para comenzar las obras», hasta que «vino aquella triste historia del señor Blanco y el señor Zapatero», ha dicho en alusión a la paralización decida por el ministro socialista de Fomento.

«Ahora que vengan a decir que va a haber un AVE…sí pero cuando va a volar el AVE», ha ironizado Revilla, quien ha insistido en que las obras tienen que empezar en 2016.

«Eso es una exigencia que planteo con toda dureza, porque no estamos pidiendo nada que no haya prometido el actual presidente -Mariano Rajoy- en carta a todos los cántabros en 2010», ha afirmado el presidente de Cantabria. Revilla ha añadido que «ya estamos hartos de promesas sin fecha y sin cuantificación económica».

En su opinión, «es un escándalo que no entiende nadie, ni lo entendemos los cántabros ni lo entiende nadie de España, que una vez más esta región, que no es para nada conflictiva y es una región cumplidora y respetuosa con la Constitución y con la igualdad de los españoles ante la Ley, nos marginen con el tren, lo mismo que ocurrió con las carreteras, que fuimos los últimos en tener una autovía».