Resulta en ocasiones demasiado generoso decir que los clubes de fútbol más modestos viven al día. La crisis también hace mella en ellos. La obligatoriedad de regularizar la situación de cualquier empleado de los clubes, ya sean entrenadores, delegados , auxiliares o jugadores ha obligado a los distintos estamentos del fútbol regional asturiano a tomar una decisión. Esta tarde en asamblea decidirán si acuden a la huelga el fin de semana del 14 y 15 de febrero.
De salir adelante esta propuesta se paralizarían todas las categorías, entre las que se encuentran también la Liga Nacional, 3ª División y Fútbol sala. Se trata de una medida planteada por el Consejo Superior de Deportes y según la estimación de algunos expertos jurídicos, cada equipo debería dedicar un 40% de su presupuesto a los pagos de la Seguridad Social.
También existe malestar en el fútbol asturiano por la postura del Gobierno regional ante la explotación de las loterías familiares y la supresión de las subvenciones al fútbol base tanto para campos como para árbitros.
Informa I. Iglesias