Madrid, 26 nov (EFE).- La abuela de la niña dominicana supuestamente asesinada junto a su madre por el novio de ésta tiene «toda la rabia del mundo, tanto por el asesino confeso como por el juzgado de plaza de Castilla que no me atendió y lo pudo evitar», ya que ella puso una denuncia en enero contra él que se archivó.
Leonarda Sánchez ha explicado en una rueda de prensa junto a varios allegados cómo han transcurrido los acontecimientos desde que ella puso una denuncia contra Raúl A.R. en los juzgados de Plaza de Castilla el pasado 16 de enero por maltratar a su nieta Algelys, de 9 años, y a la madre de esta, Adolfina, de 32, así como por amenazarla a ella misma. Una denuncia que ha mostrado a la prensa.
La abuela denunció la desaparición de su nieta y la madre de ésta el pasado 1 de julio e insistió ante la Policía en que las buscaran porque temía que Raúl les hubiera hecho daño, mientras en agosto volvió a los juzgados para saber cómo iba la denuncia de enero y le dijeron que «se había archivado porque era ilegible», por lo que interpuso otra.
Cuando la Policía le comunicó que había detenido a Raúl como «asesino confeso» de ambas, Leonarda no pudo contener su rabia y desde entonces pide «que se siga indagando el crimen, para que no quede impune» y «que se haga justicia», para lo que estudia emprender acciones legales.
«Tengo mucha rabia y dolor; tengo toda la rabia del mundo que puede tener un ser humano, tanto por el asesino confeso como por el juzgado de Plaza de Castilla que no me atendió y pudo evitarlo», ha dicho a la prensa entre lágrimas.
