IBM deposita sus esperanzas en la supercomputadora Watson

IBM deposita sus esperanzas en la supercomputadora WatsonIBM espera grandes cosas de su supercomputadora Watson. Con una inversión de 1.000 millones de dólares y el establecimiento de una nueva sede en Nueva York, IBM espera que el supercerebro, que se dio a conocer en el programa televisivo de preguntas y respuestas Jeopardy, allane el camino a la era de la inteligencia virtual.

Unos 2.000 empleados serán asignados al proyecto, de los que 600 trabajarán en la nueva sede. La plataforma de computación cognitiva tiene el potencial de «redefinir la relación entre el hombre y la máquina», dijo ante la prensa en Nueva York la directora ejecutiva de IBM, Ginni Rometty.

IBM espera que su nuevo orgullo llamado Watson le permita a este gigante de la tecnología de la información recuperar terreno en el área de la inteligencia artificial.

Exultantes, los gerentes de IBM han comparado el potencial de la supercomputadora con grandes inventos de la revolución tecnológica como la máquina de vapor. Watson está ahora alojada en un moderno edificio de cristal que ocupa toda una manzana en el barrio de Manhattan East Village, en el corazón del centro tecnológico neoyorquino Silicon Alley.

Watson también estaba presente en la conferencia de prensa. «En qué vamos a trabajar hoy», preguntó su voz desde algún rincón indefinido de la sala.

Los científicos de IBM ya llevan varias décadas desarrollando el genio de la inteligencia artificial. Watson se hizo famosa en la década de los 90 cuando derrotó al campeón mundial de ajedrez Garry Kasparov. A principios de 2011, Watson venció a dos superganadores del programa de preguntas y respuesta más conocido de Estados Unidos, Jeopardy.

Gracias a su extraordinario poder de computación, la máquina, que lleva el nombre del fundador de IBM, Thomas J. Watson, entiende comandos en inglés y parece saber todo o aprende con la velocidad de la luz.

Según IBM, Watson es capaz de comparar los síntomas de un millón de enfermos de cáncer o datos de diez millones de informes financieros y leer 100 millones de manuales técnicos en 15 segundos.

El objetivo, según IBM, es que la inteligencia cognitiva ayude a los médicos en el desarrollo de terapias o a mánagers financieros a realizar sus inversiones. La tecnología es impresionante, pero «¿será adoptada por el mundo empresarial?

«Watson está impulsando una nueva era de computación que permite a organizaciones en todo el mundo lanzar nuevas áreas de negocio, redefinir los mercados y transformar las industrias», dijo en un comunicado el jefe del proyecto Watson, Mike Rhodin. IBM ya está cooperando con cientos de socios, informó Rhodin.

Según Rhodin, Watson ha sido acogida especialmente bien por el sector de la salud. Dos grandes hospitales, Bumrungrad en Tailandia y Metropolitan Health en Sudáfrica, van a usar Watson para analizar los historiales clínicos de pacientes en un intento de mejorar la investigación del cáncer. La Universidad Deakin en Australia planea usar la supercomputadora para para optimizar un sistema de información tecnológica para sus estudiantes. Watson también será usada por la consultora en gestión empresarial australiana ANZ Global Wealth para dar mejores recomendaciones de inversión a sus asesores financieros.

Watson, que hasta ahora ha sido más bien un proyecto de prestigio, es una gran apuesta para IBM. No se prevé que la computadora milagrosa contribuya a corto plazo a aumentar de forma significativa los beneficios de IBM. Aun así, Rometty está convencida de que Watson está llamada a «escribir historia y nos acompañará durante mucho tiempo». En 1981, IBM presentó en el hotel neoyorquino Waldorf la primera computadora personal, un golpe maestro que la compañía esperar poder repetir con Watson.

Por Hannes Breustedt (dpa)