Blanca Suárez «se busca la vida» en Berlín

Blanca-SuárezBerlín, 2 abr (dpa) – Las noticias de jóvenes españoles que deciden hacer las maletas y emigrar a Alemania no es algo nuevo, pero ahora tienen su propia película. «Perdiendo el norte», de Nacho García Velilla, muestra en clave de humor una realidad muy alejada de la de los jóvenes triunfadores de programas como «Españoles por el mundo».

Blanca Suárez («Los amantes pasajeros»), Julián López («La hora Chanante») y Yon González («El Internado») dan vida a Carla, Braulio y Hugo. Tres jóvenes españoles que luchan por abrirse camino en Alemania.

Clara lleva cinco años en Berlín donde colabora en un estudio de arquitectura después de haber hecho de todo, hasta fregar suelos, y es la más realista de los tres.

Mientras, Braulio es un científico «friki» que se queda sin beca por los recortes en I+D+i y decide probar suerte en la capital alemana junto a su amigo Hugo, «un niño de papá, mimado» que se da de bruces con la realidad cuando la empresa de su padre quiebra. «Un poco Don Quijote y Sancho Panza», comenta el director en un encuentro con un pequeño grupo de periodistas hoy en Berlín con motivo del rodaje en la capital alemana.

Los tres forman un extraño trío al que se une el hermano mayor de Clara, Rafa, interpretado por Miki Esparbé, «un macarra y buscavidas».

«Clara tiene un carácter diferente. Intenta que se tranquilicen y explicarles que tienen que pasar por todo. No puedes entrar por la puerta grande nada más llegar», comenta Blanca Suárez sobre su personaje de origen humilde.

«Hablo alemán. Soy bilingüe», bromea sobre el hecho de que su personaje es el veterano del grupo. «Sólo digo una frase pero porque no quiero dejarles mal. Me costó bastante aprenderla. Y se me ha olvidado ya que es lo peor de todo».

«Ich möchte eine Fahrkarte, bitte» (Quiero un billete, por favor), dice en alemán un orgulloso Julián López sobre la frase que ha aprendido durante la semana de rodaje en Berlín.

«La historia cuenta algo muy actual. Es algo que está ocurriendo. Jóvenes que ante la imposibilidad de tener algo en España se están buscando la vida fuera», relata García Velilla.

El director, conocido por películas como «Fuera de carta» o «Que se mueran los feos», cuenta la historia desde la perspectiva de estar viviendo algo que ocurrió hace 40 años.

«La idea de la película surgió hace aproximadamente un año y medio a raíz de un artículo que leímos en ‘El País’ sobre una historia de unos chavales que después de ver ‘Españoles por el mundo’ en Oslo (Noruega) deciden hacer las maletas y acaban durmiendo en un parque con proceso de congelación en los dedos», explica.

Esa es la idea de la película rodada entre España y Alemania y que está previsto que llegue a los cines en enero de 2015. «Contar una historia dura, pero desde la óptica de la comedia». Para ello, el equipo se documentó durante seis meses con las experiencias de jóvenes españoles que habían decidido probar suerte en Alemania.

«Siempre hay diferencia, pero el perfil es muy parecido. Rollo me voy a comer el mundo y cuando llegan aquí es bastante duro. Nos contaban historias incluso de españoles que acaban trapicheando», comenta sobre algunos de los 135.000 españoles que actualmente viven en Alemania.

Para García Velilla era muy importante contrastar esta realidad con la de hace 40 años. El actor español José Sacristán, que ya interpretara en su día el papel de Angelino en «Vente a Alemania, Pepe», interpreta a Andrés, un español que llegó en 1964 y que es el encargado de aportar el punto de vista irónico sobre la nueva hornada de españoles.

«Recuerda lo duro que fue para él y critica a los jóvenes. ‘Vosotros no sabéis lo que es emigrar’, les dice. ‘Vosotros no sois emigrantes’», explica el director. «Somos trabajadores cualificados itinerantes», apunta Yon González sobre cómo les llama Sacristán.

«El que venía hace 40 años venía con una mano delante y otra detrás. Los que vienen ahora es todo lo contrario. Tienen expectativas y siempre son superiores a lo que su nivel de alemán les puede dar», indica. «Un 80 por ciento se vuelven y se vuelven el primer año. Hace 40 años no se volvían. Ese es el mayor contraste que reflejamos en la película», agrega.

Ninguno de los actores de la película, donde también participan Carmen Machi y Javier Cámara en el papel de padres de Hugo, tienen relación especial alguna con Alemania. «Lo que sí tenemos todos son colegas que se han ido a Amsterdam, a Londres o Berlín», señala Miki Esparbé.

Sin embargo, todo el equipo está encantado de rodar en Berlín y en especial en el barrio de Kreuzberg, donde está el piso que comparten los cuatro jóvenes. «Kreuzberg tiene una parte muy ‘cool’, pero también tiene una mezcla de culturas con turcos, alemanes y ahora españoles. Este contraste nos gustaba mucho», comenta el director.

«Estábamos deseando llegar a Berlín. Es el punto culminante. La historia transcurre aquí. Ha sido lo más bonito», agrega Julián López.

Los actores confiesan que no han salido mucho por la famosa noche berlinesa a excepción de a cenar donde, aunque parezca raro, no se han encontrado con españoles. «No hemos visto españoles. A lo mejor están agazapados y deciden salir el jueves o el viernes», bromea Julián López. «Quizá esta noche», apunta sobre la esperada celebración del equipo tras terminar el rodaje.

Por Almudena de Cabo