Melbourne, 14 mar (dpa) – Mercedes monopolizó hoy los primeros entrenamientos libres de cara al Gran Premio de Fórmula 1 de Australia, en un día que le permitió a Red Bull recuperar algo de esperanzas tras una desastrosa pretemporada.
«¿Aliviado?», le preguntaron al alemán Sebastian Vettel. «Sí», contestó sin dudar el hombre de Red Bull, cuatro veces campeón mundial. El cuarto mejor tiempo era para él casi un triunfo.
«Fue toda una sorpresa, logramos correr sin problemas», ironizó el campeón de las últimas cuatro temporadas, cuyo equipo llega a Australia con una debilidad y un nivel de dudas inesperados.
Una situación muy diferente a la del británico Lewis Hamilton, que encabezó hoy un uno-dos de Mercedes.
Pese a que no pudo correr en la primera sesión debido a problemas técnicos en el coche, Hamilton cerró el día con el tiempo más veloz entre todos sus rivales, 1:29,625 minutos en el circuito semiurbano de Albert Park, en Melbourne.
Su compañero de equipo, el alemán Nico Rosberg, llegó a 0,157 centésimas con un tiempo de 1:29,782, por delante del español Fernando Alonso, tercero en su Ferrari con una marca de 1:30,132. Vettel fue cuarto en su Red Bull con un giro de 1:30,381.
«Fue un día muy bueno para nosotros», se entusiasmó Christian Horner, director de Red Bull, pese a que Vettel debió esperar 50 minutos hasta tener el auto en condiciones en la primera sesión.
«Fue un inicio prometedor, aun cuando todavía haya una brecha con Mercedes y Ferrari».
Vettel dio hoy 41 giros al circuito, más que ningún otro piloto, en un intento de sumar kilómetros tras una pretemporada plagada de problemas técnicos en Red Bull. Pese a la alegría en el equipo, el dato clave fue que el alemán quedó a 0,756 segundos del británico.
Tras el retiro de Mark Webber, los australianos se entusiasmaron hoy con su nuevo nombre de referencia, Daniel Ricciardo, que a bordo del otro RB10 logró el sexto mejor tiempo en el Gran Premio que corre en su ciudad.
Alonso, que en la primera sesión del día había marcado el tiempo más veloz, quedó a 0,505 de Hamilton. El finlandés Kimi Raikkonen, nuevo compañero de equipo del español, fue séptimo.
«Fue un día positivo», dijo Alonso, campeón mundial de 2005 y 2006. «Aunque haya habido cierto elemento de nerviosismo debido a la complejidad introducida por las nuevas regulaciones técnicas, todo fue bien. El equipo hizo un gran trabajo».
El mexicano Sergio Pérez, a bordo de un Force India, fue décimo tercero en la segunda sesión de entrenamientos, con un tiempo de 1:31,283 minutos.
«Fue un día exitoso en cuanto al trabajo que hicimos, y creo que podemos sentirnos confiados para el resto del fin de semana», analizó Pérez.
Por Jens Marx
