Santander, 8 feb (EFE).- Cantabria ha llegado a registrar hoy olas que han superado los diez metros de altura y que, en algún caso, han alcanzado los once, con rachas de viento que han alcanzado los 116 kilómetros por hora, aunque no se han producido incidencias graves, más allá de la caída de arboles, señales o tejas.
La región ha vivido hoy en alerta naranja (riesgo importante) por fenómenos costeros hasta las 20.00 horas, momento en el que se ha activado la alerta roja (riesgo extremo), que se desactivará a las 00.00 horas de mañana, domingo, ante la previsión de que las olas pudiesen alcanzar los nueve metros, con vientos de fuerza ocho en el mar.
Hasta las 19.00 horas, la altura máxima de las olas había llegado a superar los once metros, según los datos registrados por la boya de la Red Vigía situada en la Virgen del Mar, aunque en general la altura media del oleaje ha estado entre los tres y los cuatro metros.
Además, esta madrugada la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha registrado, a las 2.40 horas, rachas de viento en Reinosa que han alcanzado los 116 kilómetros por hora y valores cercanos a los 100 kilómetros por hora en otras zonas de Cantabria.
Ha sido precisamente el viento el que ha provocado que los servicios de emergencias hayan tenido que realizar 15 intervenciones, ninguna de ellas de gravedad.
Las más destacadas, según ha informado el Gobierno de Cantabria, se han debido al derrumbe de un muro, la caída de señales, postes de la luz, cables del tendido eléctrico, algún árbol, tejas o por contenedores arrastrados a la calzada.
Para mañana, domingo, la AEMET mantendrá en el litoral de Cantabria, desde las 00.00 horas, la alerta naranja por fenómenos costeros ante la previsión de que se registre mar combinada del oeste-noroeste con olas de siete a ocho metros de altura, disminuyendo a cinco metros avanzada la tarde.
