Salzburgo (Austria), 19 ene (dpa) – Josep Guardiola no contaba con un «regalo» así por su 43 cumpleaños. Su Bayern Múnich, el equipo que asombró al fútbol mundial en 2013 con cinco títulos, demostró que no es invencible, que también puede perder.
«Fue una buena lección para nosotros», dijo el entrenador español después de la sorpresiva derrota por 3-0 ante el Red Bull Salzburg austríaco. «Muchos equipos son mejores que nosotros si no jugamos bien», añadió.
Era un partido amistoso, sí, pero fue la derrota más abultada de la «era Guardiola» y dejó unas sensaciones extrañas en el vestuario del campeón alemán a pocos días de que reanude la Bundesliga, el viernes ante el Borussia Mönchengladbach, tercero de la clasificación.
«No se puede jugar así», criticó el legendario Franz Beckenbauer, ahora presidente de honor del club, tras el choque disputado en un Red Bull Arena abarrotado con 30.188 aficionados.
Guardiola, que cumplió el sábado 43 años, reclamó que se valoren más las victorias del Bayern. «En la concentración en Qatar mucha gente me preguntó si algún equipo puede ganar al Bayern. ¡Por supuesto! Si nuestro rival juega muy bien podemos perder. Hoy pasó eso», señaló el técnico español.
«Cada vez que ganamos no es fácil. Creo que los jugadores saben lo difícil que va a ser la vuelta de la Bundesliga», dijo con la mirada puesta en los 16 partidos que restan en la liga alemana.
Sadio Mané (minuto 13), Jonatan Soriano (20′, de penal) y Robert Zulj (44′) marcaron los goles para el equipo austríaco, que podría haber propinado una goleada todavía mayor al campeón alemán. Mané cabeceó un balón al larguero y Manuel Neuer paró un penal en el minuto 76 a Kevin Kampl.
«Eso no nos puede pasar en la Liga», reclamó el internacional Thomas Müller.
Con agresividad, ánimo y rápidos contraataques, los «toros rojos» de Salzburgo enseñaron el camino para vencer a un Bayern que lleva 41 partidos invicto en la Bundesliga.
La derrota llegó después de un fallido experimento de Guardiola, que puso una defensa de tres con Javi Martínez, Dante y Jerome Boateng para dominar más el medio del campo. Sin embargo, las rápidas contras del Salzburg llegaban por las bandas.
Fue la tercera derrota de Guardiola como entrenador del Bayern tras el 4-2 en la Supercopa alemana contra el Borussia Dortmund y el 3-2 en casa contra el Manchester City en la Liga de Campeones.
La ausencia de cuatro jugadores clave, los lesionados Franck Ribéry, Philipp Lahm, Bastian Schweinsteiger y Arjen Robben, no es una excusa para Guardiola. «Hemos perdido por otros motivos. El rival fue mucho mejor que nosotros».
El Bayern regresará a la competición oficial el próximo viernes ante el «Gladbach», luego se medirá al Stuttgart también en Liga antes de enfrentarse al Hamburgo en los cuartos de final de Copa.
Después llegará el primer gran test de 2014: la eliminatoria de octavos de la Liga de Campeones ante el Arsenal, líder de la Premier League.
«Lo vamos a superar», dijo Boateng tras los 90 minutos en Salzburgo. «El próximo viernes empieza todo con el ‘Gladbach’ y tenemos que estar listos».
