Madrid, 18 dic (EFE).- El director general de la Policía, Ignacio Cosidó, ha dicho hoy que la decisión de comprar un camión dotado con un cañón de agua ha sido una petición de la Unidad de Intervención Policial (UIP), los antidisturbios, para hacer frente a actuaciones violentas que conllevan la quema de contenedores y colocación de barricadas.
Cosidó se ha vuelto a referir así a la polémica suscitada en el departamento de Interior en torno a la adquisición de este vehículo cisterna, una decisión de la que ayer el propio ministro, Jorge Fernández Díaz, se desvinculó al asegurar que la compra de este camión «ha sido iniciativa de la Policía».
En declaraciones a los periodistas tras presentar los 69 nuevos vehículos policiales que reforzarán la seguridad en las fronteras y preguntado sobre si se siente desautorizado por el ministro por esas declaraciones, Cosidó se ha limitado a asegurar que la adquisición de este vehículo «es un requerimiento operativo de las unidades».
Una petición que la UIP ha justificado, ha explicado Cosidó, ante la necesidad de hacer frente a incidentes como la quema de contenedores e incluso con la colocación de barreras en la vía pública.
«Necesitaban un vehículo para poder actuar en este tipo de supuestos absolutamente marginales pero extremadamente violentos», ha señalado el director de la Policía antes de mostrarse convencido de que cuantos mejores medios tenga la Policía será menos necesario el empleo de la fuerza policial.
En este sentido, ha aprovechado para elogiar el «excelente trabajo» de estos agentes en los dos años que lleva al frente de la Policía, un periodo en el que «no ha habido un solo caso de incidencia grave».
«Y eso se debe a la excelente calidad profesional y porque les dotamos del material adecuado para hacer frente a cualquier contingencia. Ese es el propósito que nos ha decidido a adquirir este vehículo», ha sostenido.
Además, ha reiterado que se trata de un solo camión -sustituirá a cinco de iguales características ya obsoletos- para una dotación de 70.000 efectivos y dentro de un parque automovilístico policial integrado por 13.000 vehículos.