París, 9 dic (EFE).- El terrorista venezolano Ilich Ramírez Sánchez, «Carlos», denunció hoy «una burda manipulación» en el proceso en su contra en París por haber proferido insultos antisemitas contra una gendarme que le hizo un registro de sus papeles el pasado mes de mayo.
«Es un montaje infame», subrayó «Carlos» ante el Tribunal Correccional de París donde compareció por la denuncia de la teniente Nathalie Benzzaki, que dijo haber sido objeto de una serie de improperios, en particular «asquerosa judía» y «asquerosa sionista».
El venezolano, que está encarcelado en Francia desde 1994, donde ha sido condenado en dos ocasiones a cadena perpetua, insistió en que los hechos no ocurrieron como los ha relatado Benzzaki, de quien dijo que «es una enferma» y que de forma recurrente ha tenido comportamientos «racistas contra los árabes, contra los africanos» y contra los «prisioneros políticos, salvo los corsos».
En primer lugar, señaló que el incidente, que se desarrolló en el calabozo del Palacio de Justicia el pasado 22 de mayo durante un juicio contra Ramírez Sánchez, no tuvo lugar a las 9 de la mañana, sino en la pausa del almuerzo, entre las 12.00 y las 13.00 horas cuando la teniente se puso a controlar una carpeta que llevaba.
Además, hizo notar que los dos testigos que la oficial de la administración penitenciaria -que no acudió hoy a la audiencia- nombró para corroborar los insultos no estaban presentes.
Es más, «Carlos» y su abogada, Isabelle Coutant Peyre, reclamaron que presten declaración los gendarmes de su escolta y vigilantes que, de acuerdo con su versión, sí que presenciaron el rifirrafe.
«Quiero los testigos aquí. Quiero a los gendarmes, que no mienten», replicó cuando el presidente del tribunal le preguntó si había pronunciado las palabras que son objeto de la demanda.
El terrorista venezolano no contestó directamente. Coutant Peyre explicó a Efe que reconoce haberla tratado de «sionista asquerosa» y haber señalado que tiene nacionalidad israelí, pero negó haber hablado de «judía asquerosa». Entre otras cosas, porque como él mismo dijo, entre sus amigos también hay judíos.
El juez decidió encargar más información para que declaren todos los testigos, incluidos los miembros de la escolta de «Carlos» ese día, y convocó una nueva audiencia para examinar este asunto que debería celebrarse el próximo 3 de marzo.
