Lisboa, 3 dic (EFE).- La vicepresidenta del Gobierno español, Soraya Sáenz de Santamaría, analizó hoy con el primer ministro portugués, Pedro Passos Coelho, los respectivos planes nacionales de reformas, con especial atención al que afecta a la administración pública española.
Es un proyecto ambicioso que el Gobierno español está ejecutando desde el pasado mes de junio para conseguir una administración «mejor dimensionada, más eficaz y más eficiente», declaró la vicepresidenta en un encuentro con la prensa.
En su entrevista con el primer ministro luso, el citado plan ha merecido «atención especial», según Sáenz de Santamaría, quien recordó que permitirá un ahorro de en torno a 37.000 millones de euros en esta legislatura con medidas de distinto alcance.
Esas medidas nacen fundamentalmente de un intento de «fortalecer la colaboración entre administraciones, de mejorar la eficiencia y de avanzar a una mayor simplificación».
Sáenz de Santamaría aprovechó la ocasión para plantear a su interlocutor los detalles de este plan de reforma de las administraciones públicas de España que, según dijo, «tiene en Portugal otro referente en su reforma del Estado»
En términos generales, la vicepresidenta explicó que su reunión con el primer ministro portugués ha servido para valorar y comparar «cómo algunos elementos importantes y que son claves en corrección de desequilibrios económicos para poder avanzar hacia el crecimiento económico, se van corrigiendo en ambos Estados».
Y se van corrigiendo, señaló, «como consecuencia del esfuerzo importante que, tanto el pueblo español como el pueblo portugués, han hecho en todo este tiempo».
En el caso concreto de Portugal, y en respuesta a una pregunta sobre sus planes de ajuste, la vicepresidenta del Gobierno español destacó que el país está logrando controlar el déficit público, así como ajustar desequilibrios económicos muy importantes que tenía y que tiene su economía.
«Quiero reconocer los esfuerzos que el Gobierno portugués está haciendo en una situación muy difícil, muy complicada para todos», dijo Sáenz de Santamaría, quien añadió que «se está haciendo un esfuerzo muy importante para algo que es común, salir de la crisis, lograr recuperarnos» y devolver el bienestar a los ciudadanos.
El segundo punto de la agenda de la reunión, celebrada esta tarde en la sede del gabinete del primer ministro, ha sido el de los temas europeos que serán objeto del próximo Consejo de jefes de Estado y de Gobierno de la UE.
Ambos coincidieron en la importancia de avanzar en cuestiones como la Unión Bancaria, lo que permitiría, a su vez, avanzar «hacia una Europa mucho más resolutiva y más eficaz a la hora de afrontar las distintas crisis que hemos vivido y las que pudieran venir en el futuro».
Al margen de la economía, los dos dejaron constancia asimismo de la excelente relación bilateral en todos los ámbitos, incluido el cultural, que también estuvo en la agenda de la reunión.
De hecho, uno de los motivos de la visita de Sáenz de Santamaría a la capital lusa ha sido la presentación de la exposición de pintura «Rubens, Brueghel, Lorena. El paisaje nórdico en el Prado», que aglutina 57 obras de la pinacoteca española y que, desde hoy y hasta el 30 de marzo, puede visitarse en el Museo de Arte Antiga de Lisboa.
Es una muestra que repasa algunas de las pinturas más destacadas del prolífico siglo XVII en los Países Bajos y que, según la vicepresidenta, «pone de manifiesto que tenemos una historia compartida», y permite reforzar «algo tan importante como la diplomacia cultural» entre los dos Estados.
Así la definía la vicepresidenta española antes de desplazarse al Museo de Lisboa para participar en su inauguración oficial junto a Passos Coelho, acto con el que ha puesto fin a su rápida visita a Lisboa.