Madrid, 30 oct (dpa) – La Justicia española condenó hoy a penas de entre 8 y 12 años y medio de cárcel a los seis piratas somalíes acusados de atacar al buque «Patiño» de la Armada española en aguas del océano Índico en enero de 2012.
La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional de España consideró a los acusados responsables de delitos de piratería en grado de tentativa y tenencia de armas de guerra, términos que los acusados negaron hace unos días en el juicio celebrado en España.
A uno de ellos, de 35 años, se le aplica la pena más alta, de 12 años y medio de prisión, por un delito de pertenencia a organización criminal dedicada «a la obtención de beneficios económicos ilícitos, consecuencia del asalto y abordaje de buques» en el océano Índico.
La Audiencia Nacional consideró que, una vez contrastado su perfil genético, coincide con el de un anónimo recogido en la escena del delito en el que se vio involucrado el buque alemán «Hansa Stavanger» en abril de 2009, cuando fue asaltado y secuestrado durante cuatro meses por cinco personas en aguas de Somalia.
La sentencia, a la que tuvo acceso dpa, considera que «no consta que el resto de los acusados (…) formaran parte de esa misma organización».
Los hechos se remontan al 12 de enero de 2012, cuando un esquife con al menos seis tripulantes intentó atacar al buque «Patiño» en aguas del Índico, al parecer al confundirlo con un barco no militar.
La sentencia de la Audiencia Nacional considera probado que los ocupantes somalíes, armados con fusiles y con un lanzagranadas, empezaron a disparar contra la estructura del «Patiño», lo que motivó «que fueran respondidos» por el buque español.
Tras el tiroteo, que duró dos minutos, el esquife se dio a la fuga y desde el buque de la Armada española se ordenó el «alto el fuego». Los hechos derivaron una persecución en la que los acusados procedieron a «arrojar a la mar» sus armas.
Finalmente, y tras dos ráfagas con ametralladora para detener al esquife, los tripulantes del buque español procedieron a la detención de los somalíes y a la asistencia de los heridos.
La Audiencia Nacional considera que «no queda acreditado que en el esquife figurara un séptimo tripulante», del que se ha hablado ni «que el mismo hubiera caído a la mar tras haber sido alcanzado por alguno de los disparos realizados desde el buque español».
Durante el juicio celebrado hace unos días, los somalíes aseguraron ser pescadores perdidos en el océano que se acercaron al buque de guerra para pedir comida.
Los acusados se encuentran en prisión provisional desde la fecha del asalto.