Greater Noida (India), 28 oct (dpa) – Con el título Mundial de pilotos y de constructores definidos una vez más a favor del alemán Sebastian Vettel y de Red Bull, al español Fernando Alonso sólo le queda un millonario objetivo mientras piensa en la próxima temporada de Fórmula 1: «Ser el mejor del resto» con Ferrari.
La escudería italiana ya no tiene opción en la lucha por el título de pilotos y de constructores, que se los ha apropiado Red Bull por cuarta vez consecutiva.
Así, para Ferrari y su estrella de 32 años sólo queda luchar por el estatus de «mejor del resto», tal como formuló el piloto de Mercedes Nico Rosberg tras el último Gran Premio de la India. Un premio consuelo que, sin embargo, podría aportar millones a las arcas del equipo.
La «scuderia» buscará en las tres últimas carreras de la temporada acumular puntos para desbancar a Mercedes del segundo lugar de la clasificación general de constructores. La diferencia es de apenas cuatro puntos.
«En Abu Dabi debemos mejorar si queremos superar a Mercedes en el Mundial de constructores», sostuvo Alonso, quien en la clasificación de pilotos está encaminado a repetir por tercera vez desde su llegada a Ferrar en 2010 el segundo lugar.
El primer puesto, por ahora, parece ser un objetivo demasiado lejano. «Tenemos que empezar y concentrarnos en el año próximo e intentar hacerle las cosas más duras», opinó un comedido Alonso sobre Vettel, que finalizará por séptima temporada consecutiva sin ningún título bajo los brazos.
Mientras Vettel volaba como recompensa tras el triunfo en la India a Suiza, su país de residencia, Alonso emprendía viaje a Abu Dabi, escenario del próximo Gran Premio.
Durante el vuelo, Alonso seguramente querrá olvidar lo ocurrido en el Gran Premio de la India, donde tuvo incovenientes desde el inicio y finalizó undécimo.
Poco después de la salida chocó con el piloto de Red Bull Mark Webber y rompió el alerón delantero de su Ferrari. Para fortuna del equipo, su compañero brasileño Felipe Massa cruzó la meta en cuarto lugar y aportó puntos vitales en la lucha por el segundo lugar en la clasificación de equipos.
Pese a los problemas que tuvo en su vehículo, el ex campeón Mundial en 2005 y 2006 no ahorró elogios hacia Red Bull: «Fueron muy fuertes, muy dominantes, especialmente en la segunda mitad de la temporada. Por ello merecen ser campeones mundiales», reconoció sin envidia el español, acostumbrado ya a un lugar lejos de los «flashes».
Por Martin Moravec